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Un Masters de Augusta muy abierto arranca con Jon Rahm buscando retornar a lo más alto

La primera «major» de la campaña comienza este jueves con la presencia entre los favoritos del golfista de Barrika, así como un Tiger Woods que regresa tras superar un grave accidente en 2021 y dispuesto a igualar a Jack Nicklaus ganando su sexta chaqueta verde.

Jon Rahm, con el ganador de 2017 Sergio García. (Gregory SHAMUS / AFP PHOTO)

El japonés Hideki Matsuyama defiende el título ganado el año pasado en el Masters de Augusta. Pero el golfista nipón no parece el principal candidato a ponerse la famosa chaqueta verde, signo distintivo del ganador del primer «major» de 2022, que se pondrá en marcha a partir de este jueves.

Nombres como Collin Morikawa, el mejor jugador del mundo con los hierros, el noruego Viktor Hovland, el australiano Cameron Smith, el vencedor de 2020 Dustin Johnson brillan con luz propia en la lista de favoritos para imponerse en el en el histórico recorrido de Augusta National. Pero por encima de todos, los nombres propios del mentado Jon Rahm y el «recuperado» Tiger Woods, ganador de cinco chaquetas verdes, el último en 2019, eclipsan a los demás.

El de Barrika estrenó el año pasado su palmarés en los cuatro grandes torneos, y aunque en Augusta todavía no ha podido ganar, siempre ha logrado situarse entre los mejores.

«Siempre que he jugado aquí he jugado bien o con opciones de ganar y estando ahí arriba. A ver si llego al domingo con mejores opciones de ganar y, sobre todo, en los nueve segundos, estoy cerca del liderato para poder ganar», ha dicho Rahm a EFE durante la rueda previa al inicio del torneo.

Con 27 años, el golfista vizcaino se prepara para su vigésimo primer «major» después de ganar el Abierto de Estados Unidos, en junio de 2021 en Torrey Pines, California, y de ocupar el primer puesto del golf mundial durante 43 semanas consecutivas.

El ahora número dos del mundo, a décimas del estadounidense Scottie Scheffler, otro de los favoritos para llevaste esta «major», ha llegado a Augusta preparado para agregar otra chaqueta verde a las dos conquistadas por Chema Olazabal en 1994 y 1999 –presente en Augusta con el objetivo de pasar el corte–, y que parte con el buen recuerdo de sus grandes actuaciones en tierras del estado de Georgia.

«Ese -6 de la vuelta del domingo del año pasado... fue un muy buen resultado con el viento y los greenes duros», ha explicado Rahm sobre su final empatado en el quinto puesto en 2021.

«Siempre me voy a acordar del segundo golpe en el 15 en 2018. Ese hierro 6 que si vuela un metro más estaba clarísimamente para ‘eagle’ y con opciones de ganar, pero acabó en el agua e hice bogey», recordaba el de Barrika.

«Ese año, en su segunda participación en el Masters, terminó en el cuarto puesto. Empecé con +1 y una vuelta de -7 el sábado me puso ahí arriba. He tenido muy buenas rondas en Augusta», ha comentado Rahm, lleno de entusiasmo y energía, después de varios días de descanso y desconexión.

«Ha estado muy bien tomarme una semana libre y practicar en casa. Siempre estamos deseando ver los pequeños ajustes que hacen los socios y el campo parece fantástico como siempre», ha dicho el de Barrika acerca de las condiciones del campo para la edición 86 del Masters de Augusta.

El ganador del US Open de 2021 llega esta vez al Masters acompañado de su esposa Kelley y de su primer hijo con un año recién cumplido Kepa, que intentará perseguir a su «aita» por el campo, que podría presenciar el nacimiento de su segundo hijo en unos meses, vestido con la chaqueta verde del campeón del Masters.

El retorno del «Tigre»

Por su parte, La estrella del golf mundial Tiger Woods, alejado de la competición desde febrero de 2021 como consecuencia de un gravísimo accidente de tráfico en el que casi perdió una pierna, ha llegado a Augusta National, la sede del primer grande del año, con el paso firme y dispuesto a repetir su victoria de 2019, la última de las cinco que atesora.

«De momento, siento que sí voy a jugar», dijo Woods en una conferencia de prensa abarrotada de periodistas internacionales que no esperaban una recuperación y un regreso tan tempranos.

«Lo que está haciendo Tiger es muy difícil. El año pasado tuve que infiltrarme solo para poder jugar. Es muy duro caminar y las horas antes y después del torneo se hacen días muy largos. Sé por lo que está pasando”, dijo por su parte el estadounidense Brooks Koepka, ganador de tres grandes, que jugó el Masters de 2021 dos semanas después de una operación de rodilla.

Si se confirma su participación, Tiger Woods saldrá el jueves por la mañana a competir en su vigésimo cuarto Masters de Augusta junto con el sudafricano Louis Oosthuizen y el chileno Joaquín Niemann, que juega su tercer Masters.

«Cambia el torneo cuando Tiger está acá. Se siente en el público que va con otra actitud. Tiger aporta mucho al golf mundial y tenerlo aquí con nosotros es impagable», comentó el propio Niemann.

Otro veterano bicampeón del Masters y referente de Tiger Woods, el hondarribiarra Txema Olazabal, ha pasado varias veces por los contratiempos de graves lesiones durante su carrera.

«Lo principal es creer que puedes. Si tu condición física es suficientemente buena para entrenar y jugar, entonces tienes que creer otra vez, necesitas una fuerza mental interior que te dice que todavía puedes ganarles a todos», dijo Olazabal, afirmando que Tiger la tiene.

No parece que el golfista estadounidense vaya a conseguir empatar en el palmarés al gran Jack Nicklaus, ganador de seis chaquetas verdes –1963, 1965, 1966, 1972, 1975, 1986–, pero lo cierto que es el único que, por el momento, puede lograrlo.

Olazabal dará el primer golpe

Como queda dicho, Txema Olazabal será el segundo representante vasco en el Masters de Augusta. El hondarribiarra se enfundó la chaqueta verde en 1994 y 1999, y aunque sus días de mayor gloria ya quedaron atrás, el prestigio y el respeto los tiene ganados por toda la eternidad.

Así, las cosas, será el encargado de dar el primer golpe del Masters de 2022.

Su acompañante será el estadounidense J.J. Spaun, último jugador en clasificarse tras ganar el pasado domingo el Valero Texas Open.

«Es un campeón del Masters y no podría estar más entusiasmado por ver qué hace alguien que ha tenido tanto éxito en este campo, y cómo juega aquí para lograrlo», declaraba el propio Spaun, que llegó al golf profesional después de un comienzo humilde, similar al de Olazabal.

El de Hondarribia va a disputar su 33 Masters de Augusta. «Intentaremos disfrutar todo lo posible», ha señalado el guipuzcoano en la previa, consciente de que pasar el corte ya sería un gran éxito.

De hecho, Olazabal no llega a Augusta en su mejor nivel de juego como consecuencia de unas molestias en un codo, producto de una tendinitis más que molesta. «Este año está siendo un poquito duro. Empecé bien la temporada y he tenido problemas físicos sobre todo en el codo derecho y la espalda. No hemos podido preparar el torneo como nos hubiese gustado», dijo el golfista de 56 años, que compite ahora en el «Champions Tour», el circuito senior de Estados Unidos.