Polonia dice que ha sufrido «presiones» para decir que el misil que cayó en su suelo es ruso
Las autoridades polacas aseguran han recibido «fuertes presiones» con el fin de decir que el proyectil que cayó el martes en el este del país procede de Rusia y no de Ucrania, tal y como ya ha reconocido incluso la OTAN. Kiev ha suavizado sus declaraciones, aunque sigue queriendo sembrar la duda.
El viceministro de Exteriores polaco, Arkadiusz Mularczyk, ha señalado en una entrevista con la emisora Radio 24 que «ha habido grandes presiones» para que dijese que el proyectil que cayó el martes en el este del país procede de Rusia y no de Ucrania. Así, ha destacado que en caso de haber sido ruso, «esto hubiera puesto en marcha nuevas dinámicas en el país y en todo el mundo».
Ha expresado su simpatía con las familias de las dos víctimas mortales registradas a raíz de la caída del misil, que serán enterradas el sábado con honores de Estado, y ha incidido en que, «desgraciadamente, todo apunta a que ha sido un accidente desafortunado y no un acto intencionado por parte de Rusia».
Actualmente ya hay un equipo de investigadores polacos y estadounidenses trabajando en la zona, tal y como ha confirmado un asesor del presidente, Andrzej Duda, que ha descartado también que se tratase de un ataque intencionado contra Polonia.

De hecho, la OTAN, EEUU y varios Estados occidentales también han afirmado que el misil que cayó en suelo polaco es del Ejército ucraniano, probablemente de su sistema de defensa aéreo. Aún así, estos países han culpado a Rusia de ser el «responsable último» de lo sucedido.
En un programa de televisión polaco, Jakub Kumoch, responsable de política internacional de la oficina presidencial, ha afirmado que «ahora mismo hay muchos indicios de que uno de los misiles ucranianos para derribar misiles rusos no dio en el blanco, su sistema de autodestrucción no funcionó y este misil, lamentablemente, provocó la tragedia».
Ucrania sigue queriendo sembrar la duda
Después de dos días insistiendo en que el misil era ruso, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha suavizado este jueves sus declaraciones. No obstante, señala que aún se «desconoce al cien por cien qué pudo ocurrir, de tal forma que no se podría acusar aún a ninguna de las dos partes».
Este mismo jueves, Zelenski ha indicado que Kiev ha recibido una invitación para sumarse a una comisión internacional especial que investiga las circunstancias de la caída del proyectil, según ha recogido la agencia de noticias Ukrinform.
«Ayer insistimos en que debíamos ser incluidos en esta comisión. Efectivamente, nuestros expertos irán al lugar de los hechos y se unirán a la comunidad que lo investiga», ha dicho.