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La hazaña de la gimnasta Rebeca Andrade inspira a las niñas en su Sao Paulo natal

La gimnasta brasileña Rebeca Andrade, ganadora de un histórico oro en París, es fuente de inspiración para las nuevas generaciones de su país.

La brasileña Rebeca Andrade, campeona olímpica de suelo por delante de Simone Biles. (AFP7 vía Europa Press | Europa Press)

En el gimnasio donde Rebeca Andrade dio sus primeros pasos, cerca de Sao Paulo, no se habla de otro asunto: el histórico oro olímpico conquistado en París por la brasileña, que inspira a una nueva generación de gimnastas de su país.

Entre las niñas, sus padres y los profesores, el entusiasmo era generalizado tras el triunfo de la atleta de 25 años, que venció en la prueba de suelo a la estadounidense Simone Biles. 

El éxito de Andrade hizo explotar las inscripciones en el centro de entrenamientos a principios de este mes, cuando ya habían empezado los Juegos Olímpicos.

La hija de Wiliam Santos Pereira, de 48 años, entrena en el gimnasio y no esconde el entusiasmo de ir tras los pasos de su ídola. «Con mucha emoción, mi hija Débora, le responde a sus vecinos: ‘sí, yo entreno en el mismo lugar que ella’», ha afirmado.

«Es una alegría y una oportunidad muy importante saber que ella empezó aquí donde estoy ahora, y con la misma técnica. Es muy inspirador», dijo la gimnasta Lara Santana, de 12 años. 

«Hace unos seis o siete años no imaginábamos que una gimnasta brasileña estaría en lo alto del podio, y hoy es una gimnasta de Guarulhos la atleta más premiada de Brasil, incluyendo hombres y mujeres», celebra Anjos. «No imaginaba que la fila iba a dar vuelta a la manzana, la demanda fue muy grande», cuenta. «Eso es bueno para nuestro deporte. Cuantas más niñas se acerquen a este deporte, más Rebecas podemos encontrar», sostiene ella.

«La demanda es muy alta. Así como los varones van detrás del fútbol, hoy las niñas buscan la gimnasia artística», cuenta Anjos, en medio de la euforia que la victoria de la brasileña en la final de suelo suscitó entre las estudiantes del recinto deportivo. 

En el lugar se exhiben numerosos trofeos y fotos de Andrade. Y su rostro decora un colorido mural en la pared, que inspira a las miles de niñas y adolescentes formadas en las instalaciones.

Los comienzos en el mundo de la gimnasia

La campeona olímpica aterrizó allí con cuatro años gracias a su tía Cida, que trabajaba en la cocina del lugar, sede de un proyecto social y deportivo de la alcaldía de Guarulhos.

Su asistencia a los entrenamientos llegó a estar en riesgo por falta de dinero. Pero al ver su habilidad, sus hermanos mayores se ofrecían a acompañarla durante una caminata de dos horas.

«Es un orgullo inmenso pensar que ella salió de aquí y la vi cuando era pequeña, es una emoción gigantesca», ha dicho Mónica Barroso dos Anjos, primera entrenadora de Andrade en el gimnasio Bonifácio Cardoso, en Guarulhos.