«Esto es lo que hoy tenemos que no teníamos anteayer», ha dicho en conferencia de prensa la portavoz del Ejecutivo, María Solana, quien ha subrayado que «más allá de la obsesión con la alta velocidad, que no han demostrado ni el Gobierno central ni el Gobierno de Navarra, está la firme intención de avanzar en las altas prestaciones», y en este objetivo «hay una diferencia clave de anteayer a hoy».

En este sentido, el vicepresidente de Desarrollo Económico, Manu Ayerdi, ha subrayado que el Ejecutivo navarro «no comparte» la alta velocidad entendida solo para pasajeros y a más de 300 kilómetros por hora y «tampoco el Gobierno de Madrid la defiende porque no está siendo eficiente».

La alternativa en la que ambos gabinetes coinciden es en un corredor ferroviario que una Iruñea con Zaragoza y la ‘Y’ de la CAV, para pasajeros y mercancías, con estándares internacionales, suficiente capacidad, y que circularía a 200-230 kilómetros por hora para pasajeros y a 80-100 para mercancías.

Para ello, lo decidido ayer entre ambos en relación con una infraestructura «estratégica para Navarra» es que el Ministerio español se encargue de sendos estudios de opciones entre Castejon-Zaragoza e Iruñea-Y, evitando aquí el «efecto frontera», además de que «ha aceptado» analizar una doble vía Iruñea-Altsasu.

Junto a ello, ambas administraciones de forma conjunta trabajarán en un nuevo convenio para Campanas-Castejon (Iruñea-Tutera) ya que el firmado de 2011 «está desbordado por la realidad».

Desbordado según Ayerdi en presupuesto, plazos, y devoluciones de IVA y anticipos hechos por Nafarroa, 45 millones de euros que espera reintegrar este año, «no veo otro escenario», por lo que ha confiado en que, «con sentido común», se llegue a un nuevo convenio.

Para el vicepresidente, este nuevo acuerdo debería tener en cuenta el dinero invertido en el tramo Castejon-Zaragoza en una plataforma de 15 kilómetros, sin «ninguna superestructura», y que ofrece posibilidades para cualquier tren porque puede entrar en ella una doble vía.

Con todo, ha asegurado, hoy Nafarroa tiene «un compromiso efectivo» para estudiar las posibles opciones sin excesivo coste para el Estado, el competente en estas obras, después de años en los que el proyecto ha estado «parado».

Y en este sentido ha recordado que en 2013 el Gobierno de UPN habló del tercer hilo como una posible solución para los tramos Castejon-Zaragoza e Iruñea-Y, y lo hecho cuatro años después es «cero patatero».