La plataforma vizcaina, que ha ofrecido una rueda de prensa previa a la marcha convocada para este sábado, consensuó este pasado jueves un comunicado unitario, que será leído al término de la manifestación, con los movimientos de Gipuzkoa, Araba y Nafarroa donde el colectivo afirma ser «consciente» de la importancia de los próximos meses, «más aún cuando en mayo se van a celebrar elecciones municipales, forales, europeas y autonómicas en algunos casos y todos los partidos van a tratar de no aparecer, al menos, contrarios a nuestras demandas».
En ese sentido, han remarcado que han remitido cartas a los Gobiernos de Madrid, Gasteiz e Iruñea, y a todos los grupos parlamentarios de las diferentes cámaras, para «hacerles llegar directamente nuestras demandas y que asuman, sin mayor dilación, medidas para mejorar y garantizar nuestras pensiones».
Además de la manifestación de este sábado en Bilbo, el movimiento de pensionistas ha anunciado que va a articular «un día de movilización conjunta en Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa durante el mes de mayo que van a tratar de coordinar con el resto del Estado».
Asimismo, el colectivo ha transmitido que también estará presente en las reivindicaciones feministas que se convoquen con motivo del próximo 8 de marzo.
El movimiento de pensionistas considera en su comunicado que el balance de lo conseguido este año desde el inicio de las movilizaciones «ha sido escaso pero no despreciable, porque hemos logrado que las demandas del movimiento de pensionistas hayan entrado en la agenda política de partidos políticos e instituciones y nadie podrá eludir tener que posicionarse y seguir tomando medidas de mejora de las pensiones».
En la nota se apunta que este 2019 será un año «clave» en su lucha y aboga por dar pasos «importantes con nuevas formas reivindicativas y de presión», asumiendo el reto de «hacer realidad las alianzas con nuevos sectores sociales, sobre todo los jóvenes y los trabajadores».
La manifestación de este sábado partirá a las 17.00 desde la sede de Confebask, situada en la Gran Vía bilbaina, y concluirá ante el Ayuntamiento.