¿Cuál es el principal rasgo de su carácter?
Me considero un hombre de pacto, de acuerdo, de respeto y de diálogo.

¿Qué cualidad aprecia más en un hombre?
La nobleza, unida a valores como la amistad, la cuadrilla...

¿Y en una mujer?
La inteligencia, su capacidad de trabajo y su lucha por valores como la igualdad.

¿Qué espera de sus amigos?
Principalmente cariño, la oportunidad de compartir experiencias y vivencias, siendo capaces de disfrutar de los buenos momentos.

¿Cuál es su principal defecto?
Ser demasiado sincero, no saber callarme y decir siempre lo que pienso.

¿Su ocupación favorita?
Como soy geógrafo, me encanta viajar y descubrir nuevos paisajes, culturas y gentes. Me gusta valorar la singularidad de cada paisaje y la diversidad de la gente.

¿Su ideal de felicidad?
Un momento de calma, de sosiego y tranquilidad. Aprecio esos momentos de relax con las personas a las que quieres y aprecias.

¿Cuál sería su mayor desgracia?
Volver a una sociedad con odios, exclusiones, violencia sin sentido.

¿Qué le gustaría ser?
Sin duda, geógrafo, que es la carrera que estudié. Me gustaría terminar la tesis doctoral y compartir conocimientos.

¿En qué país le gustaría vivir?
Realmente estoy encantado con el país en el que vivo. Amo mi país y muy especialmente Donostia/San Sebastián.

¿Su color favorito?
El amarillo.

¿La flor que más le gusta?
Puede sonar forzado, pero realmente me gustan las rosas y las rosas rojas en particular.

¿El pájaro que prefiere?
Me gustan los canarios y los jilgueros.

¿Sus autores favoritos en prosa?
Me gustan muchos, pero destaco ahora Eduardo Mendoza y Almudena Grandes.

¿Sus poetas?
Federico García Lorca y Juan Ramón Jiménez.

¿Un héroe de ficción?
No soy de héroes de ficción, me gustan más los de verdad.

¿Una heroína?
Cualquier mujer que luche por sus derechos, como las sufragistas y especialmente Clara Campoamor.

¿Su compositor favorito?
Chopin y Bach.

¿Su pintor preferido?
Van Gogh y Goya.

¿Su héroe de la vida real?
Para mí un referente personal y político es Jesús Eguiguren, artífice de la paz en Euskadi.

¿Su nombre favorito?
No tengo ninguna preferencia. Lo importante no son los nombres, sino las personas que hay detrás de cada uno de ellos.

¿Qué hábito ajeno no soporta?
Los gritos y la impertinencia. No soporto la bronca.

¿Qué es lo que más detesta?
La mentira, el juego sucio y la mezquindad.

¿Una figura histórica que le ponga mal cuerpo?
Todos los dictadores y tiranos.

¿Un hecho de armas que admire?
El triunfo de la II Guerra Mundial.

¿Qué don de la naturaleza desearía poseer?
Su frescura, esa capacidad para ser grande y rica en cualquier momento.

¿Cómo le gustaría morir?
Sin dolor y de forma rápida. Y si es posible, rodeado de mi gente.

¿Cuál es el estado más típico de su ánimo?
Creo que el optimismo y el buen humor, ser receptivo a las cosas que suceden.

¿Qué defectos le inspiran más indulgencia?
Casi todos, salvo el odio, la intolerancia o la xenofobia.

¿Tiene un lema?
Dar lo mejor de cada uno todos los días para que las cosas vayan lo mejor posible.

¿Cuáles han sido sus quince minutos de gloria?
Recuerdo especialmente la aprobación del matrimonio gay, que lo viví en el Congreso de los Diputados y, consecuencia de ello, mi relación tanto con mi pareja como con mi familia.