«Tras una espera injustificada, el Ejecutivo español ha resuelto la petición de despacho y autoriza al buque a navegar a Sicilia, donde repostará para continuar hacia Lesbos (Grecia)», acaba de comunicar la ONG Salvamento Marítimo Humanitario (SHM).

La asociación armadora del Aita Mari llevaba semanas esperando el permiso preceptivo de Madrid, que daba continuidad a las trabas a su acción humanitaria desde el principio y que han limitado su función al reparto de material de ayuda a refugiados.

«Por desgracia, el despacho (la autorización que todo barco debe tener antes de abandonar puerto) restringe de nuevo al Aita Mari a realizar operaciones de rescate», confirma SHM. Y añade que «esta limitación de España va en contra de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Unclos). En su artículo 98 recoge el ‘deber de prestar asistencia: (a) prestar asistencia a cualquier persona encontrada en el mar en peligro de desaparecer. (b) Proceder a máxima velocidad a rescatar a las personas en peligro’», recuerda.

Siete toneladas

El Aita Mari ya tiene cargadas en sus bodegas más de siete toneladas de material de emergencia. Sobre todo ropa de abrigo, calzado de invierno a estrenar, mantas y tiendas de campaña.

En la primavera pasada, el buque vasco realizó ya este tipo de labores en las islas griegas, antes de que tener que regresar a Pasaia en junio para proceder a reparaciones y adaptaciones.

SMH está desplegada desde 2015 en Quíos (Grecia) con un equipo médico. En la actualidad, es la única asistencia sanitaria que reciben las personas migrantes atrapadas en el campo de refugiados de esa isla, explica.

La intención de la ONG es echar el Aita Mari a la mar este próximo miércoles, 17 de octubre, desde Pasaia.