La segunda ola del coronavirus avanza a gran velocidad en el Reino Unido. Según los datos oficiales divulgados, se han registrado 6.178 contagios en veinticuatro horas, la cifra más elevada desde el pasado 1 de mayo, y 37 muertes, hasta un total de 41.862 decesos desde el inicio de la pandemia. 

Ante ello, el Ejecutivo de Boris Johnson ha endurecido las medidas con el cierre de pubs y restaurantes a partir de las 22:00 en Inglaterra, y un aumento de las multas para quienes no cumplan con las reglas. 

Escocia no se libra de la tendencia negativa y ayer contabilizó 486 nuevos casos, la cifra más alta en 24 horas desde que estallase la pandemia en marzo.Los datos más recientes elevan el número total de positivos en Escocia hasta los 25.495, con dos fallecimientos en las últimas 24 horas, lo que sitúa la cifra de decesos desde marzo en 2.508 personas.  

La premier escocesa también anunció una serie de medidas como prohibir las reuniones en casas particulares y, a partir de hoy, obligar a bares y restaurantes a cerrar a las 22:00. Las nuevas restricciones, aunque se revisarán cada tres semanas, se han planteado con un alcance de seis meses, lo que no significa, puntualizó Sturgeon, que todas ellas tengan que alargarse durante todo el periodo.

Sin embargo, el Ejecutivo escocés reclama más margen de maniobra para hacer frente a la crisis sanitaria. Y para ello necesita la devolución de algunos poderes por parte de el Gobierno británico. Así se lo ha hecho saber Sturgeon a Johnson.

La premier escocesa afirmó ayer que «probablemente» habría anunciado restricciones más amplias, posiblemente el cierre total de bares, para detener la propagación del coronavirus si su Gobierno tuviera poderes «para limitar la pérdida de empleos que causarían esas restricciones».

«Ya sea a través de la acción del Gobierno del Reino Unido, la extensión de poderes, o algunas flexibilidades fiscales razonables pero necesarias para los gobiernos delegados, todos podemos tomar las decisiones que creemos necesarias para suprimir el virus y salvar vidas, al mismo tiempo que mitigar el impacto en el empleo», apuntó Sturgeon.

La líder escocesa considerá que «en general, las medidas no han ido lo suficientemente lejos». Además, afirmó que en marzo «no se tomaron medidas lo suficientemente rápido» y que «ese error está a punto de repetirse».