Cuatro décadas después de que unos jóvenes iruindarras creasen Barricada en el barrio de Txantrea, El Drogas, su figura más icónica, ha llevado el legado del grupo a la sala Zentral de la capital iruindarra.

«Es una historia muy “punkarra” y va a haber muy pocas canciones lentas», afirmaba Enrique Villarreal ‘El Drogas’ en la entrevista publicada este viernes en NAIZ. Dicho y hecho. Apenas un respiro encabezado por ‘Pétalos’ a mitad de camino se ha salvado de esa promesa.

Había mono de concierto y había mono de Barricada. Con una sala repleta, todas las entradas vendidas en unas pocas horas y un público de generaciones muy dispares entregado, El Drogas ha salido al escenario de Zentral en medio de una fuerte ovación y al ritmo de ‘La silla eléctrica’.

El músico txantreano ha llevado, por unas horas, las fiestas que su barrio celebra durante estos días al centro de la ciudad. De hecho, se han dejado ver varios pañuelos festivos, que no han querido perderse una cita como la de hoy. Sin embargo, El Drogas no ha tardado en descender la cuesta de Labrit para volver a casa y pronto ha quemado el ‘Barrio conflictivo’.

Para celebrar el aniversario, El Drogas, con Brigi a la batería, Flako al bajo y Txus a la guitarra, ha preparado una mini gira de ocho fechas en la que repasará los grandes himnos de Barricada y que ha arrancado este viernes en la capital navarra.

El Drogas, además de un músico con una dilatada carrera, se envuelve en su capa de actor en cuando comienzan los primeros acordes y las luces le apuntan. Enlazando décadas de éxitos con su particular escenificación de cada tema ha pasado por ‘Okupación’, ‘No sé qué hacer contigo’, ‘Bahía de Pasaia’ y ‘A toda velocidad’, antes de ponerle un poco de pausa a la noche con ‘Pétalos’.

El vocalista navarro, lo que tiene que decir lo dice a través de sus canciones. «Escribimos sobre lo vivido», ha apuntado. Y así se expresa en cada bolo. No acostumbra a realizar grandes discursos entre tema y tema. Y hoy no ha sido una excepción. Tampoco hacía falta. El músico iruindarra ha resumido lo vivido hoy con su mítico «a gusto», repetido en infinidad de veces. «A gusto», ha respondido el público en cada ocasión.

Tras recuperar esa prometida vena «más punkarra» con ‘Sean bienvenidos’, han llegado dos de los momentos más emotivos de la velada. ‘Animal caliente’, que ha corrido, casi en su totalidad, a cargo de las cientos de personas que han abarrotado la sala Zentral de Iruñea, ha dado paso al homenaje de la jornada.

Enrique Villarreal, ‘El Drogas’, ha reconocido que preparar el repertorio de esta gira «fue una comida de tarro». Y a la hora de elegir los temas que les acompañarán en estos bolos, apostó por los escritos por él mismo. Pero en este 40 cumpleaños no podía faltar Javier Hernández, ‘Boni’, fallecido en enero de 2021 tras una larga enfermedad. Y de su puño y letra, o «a medias con El Drogas», como solía decir el propio Boni, salió ‘Objetivo a rendir’ que ha llegado a los corazones de los seguidores de Barricada.

A partir de ahí, poco tiempo para la nostalgia y mucho rock&roll. ‘Oveja negra’ y unos coreadísimos ‘Todos mirando’ y ‘En blanco y negro’, han servido de primera despedida. Sin embargo, como viene siendo habitual, nadie ha perdido su sitio y la banda ha regresado al escenario para entonar ‘La hora del carnaval’ y, con casi dos horas de concierto a sus espaldas, cerrar la fiesta de cumpleaños con ‘No hay tregua’.

En definitiva, en forma, «a gusto» y con 40 años al frente de la Barricada, El Drogas ha cumplido las expectativas. El «bis», este sábado. Pero no lo intenten, las entradas están agotadas desde el mismo día que salieron a la venta.