IKER FIDALGO ALDAY
PANORAMIKA

Fuera/dentro

El desarrollo del llamado arte público se inicia en Estados Unidos en los años 60 con la revalorización de los espacios urbanos como lugares expositivos. Superando lo que Judith Bacca denominó «Cannon in the Park» (Cañón en el parque) refiriéndose a las obras que se limitaban a crear memoria en torno a creaciones escultóricas que glorificaban la historia local o bélica, comienzan a surgir programas de creación municipales y privados en los que la ciudad y los espacios comunes se erigen como nuevos escenarios para el arte. El crecimiento de esta tendencia evoluciona en los años posteriores y se comienzan a valorar cuestiones como la importancia de la adecuación de la pieza al espacio concreto (site-specific) y la potencia política de la creación vinculada a la ciudad.

Desde el día 22 de enero, podremos disfrutar del proyecto “Iturriak/Fuentes”, de la artista Maider López (Donostia, 1975). Una instalación que durará hasta diciembre de este año y enclavada en el programa cultural de Donostia2016. La creadora propone un proyecto de arte público en los jardines de Ondarreta en el que varias fuentes retiradas de la ciudad se encontrarán compartiendo un espacio común. En este (re)encuentro con estas piezas de mobiliario urbano, las memorias, historias y recuerdos que suscitan los escenarios donde sucede nuestra vida resucitan para demostrar la vinculación de nuestros cuerpos con la ciudad y con los elementos que la componen. El proceso de investigación de este proyecto completará la exposición de la propia López “Tokialdatu/Desplazamiento”, ya reseñada en Panoramika y que podrá visitarse aún hasta el 6 de febrero en el Koldo Mitxelena Kulturenea.

Si entendemos el espacio público como aquel en el que nuestra vida se hace visible y compartida, es inherente aceptar la existencia de un espacio privado-íntimo que lo complementa. El hogar representa el terreno en el que nuestra intimidad es puesta en práctica y bloqueada a los ojos externos, es decir, a la vida pública, mediante paredes y persianas.

Mateo Maté (Madrid, 1964) pasa por ser uno de los artistas conceptuales más representativos del panorama actual. En este caso, el próximo 23 de enero concluye la muestra planteada en la Galería Altxerri (Donostia), en la que aún podemos disfrutar del conjunto de piezas que conforman “Nacionalismo Doméstico”.

El recorrido planteado por el artista nos permite asistir a recreaciones de nuestro salón, nuestro recibidor o nuestro pasillo desde una imaginería bélica que propone el hogar como campo de batalla. En una televisión, un alto mando del Ejército nos arenga con una receta perfecta (“Thanksgiving Turkey 2007”), los manteles de las mesas son banderas y los cuadros que decoran nuestro pasillo se pintan con estética de camuflaje.

La violencia externa se inserta en nuestras vidas y Maté nos invoca a entenderla e identificarla desde un juego visual con ciertos toques humorísticos que, por otro lado, nos hacen ser conscientes de su presencia constante en nuestra cotidianeidad.