IKER FIDALGO ALDAY
PANORAMIKA

Rol

La figura del artista contemporáneo es fruto de las diferentes acepciones que ha ido asumiendo a lo largo de la historia. Desde su vinculación con el poder y la religión hasta el carácter rupturista e innovador de las vanguardias del siglo XX, la labor de la creación y su papel en la sociedad ha variado tanto que el propio concepto arte ha trasladado su significado en función del espacio que ocupa. Se podría pensar que la incursión en el discurso de la posmodernidad y el trato con los relatos minoritarios dotan de una posición autorreferencial a la creación artística, en la que lo vivencial o lo personal adquiere cierta relevancia en un periodo unido al desarrollo de la sociedad de consumo y un capitalismo que asume el arte como objeto de especulación. El desarrollo del sistema económico en los años pre-crisis, junto con el auge del turismo cultural y la construcción de museos y espacios culturales, propusieron un escenario que a día de hoy sufre las consecuencias en forma de dificultades programáticas y de estructuras en ocasiones desligadas de su entorno social más próximo. Entre tanto, el rol del artista se debate entre la situación precaria: la supervivencia y la dependencia de lo público, abriendo nuevos espacios de resistencia y acción en los que, ante la incógnita del futuro, el presente se entiende como el único tiempo tangible.

“Cuando el arte es una forma de comportamiento” despliega sobre el museo de ARENATZarte en Güeñes hasta hoy día 31, una apuesta comisarial en torno a esta situación. Cinco artistas, cinco formas de trabajar, cinco planteamientos distintos y cinco maneras de resistencia que se presentan a la luz del programa Harriak de Eremuak. Cada una de las propuestas demuestra desde su génesis una rotunda sinceridad en torno al rol con el que acometen en el espacio simbólico de la creación y en la presencia física de la galería. El propio espacio expositivo presenta una especificidad en la organización visual de la muestra, tratándose de una galería acristalada que propone una relación directa con el exterior frente al habitual entorno neutro de las galerías. Una vez dentro, los trabajos de Diego Vivanco, Estibaliz Sádaba, Iago Rey, Irati Santos Inoriza y Miriam Isasi se conjugan en una convivencia que permite a primera vista toparse con una visión general del compendio de las piezas.

En un análisis más exhaustivo, las diferentes formas de materialización (vídeo, instalación, fotografía y escultura) responden en cada momento a una narrativa propia bien definida, que exige al visitante un grado de responsabilidad en la decodificación de los estímulos. La visita propone preguntas, dudas, planteamientos y acciones que se enclavan en la reflexión sobre la identidad del artista y su espacio en la sociedad actual.

Por otro lado, la casona de estilo vasco Villa Arnaga, situada en la localidad labortana de Kanbo, inauguró el 24 de junio una exposición de arte contemporáneo dentro del marco Conversaciones del programa DSS2016. El pintor José Antonio Sistiaga (Donostia 1932) y el escultor Iñigo Arregi (Arrasate 1954) conviven hasta el 16 de octubre en espacios expositivos poco usuales. La villa, los jardines, el invernadero y las caballerizas aportan a las obras expuestas un contexto visual atípico que sin duda suma un aliciente más para motivar el recorrido de la muestra.