Los problemas ocasionados por la climatología, a veces de grado impredecible, han dejado en la cuneta a muchos usuarios del transporte aéreo o que viajaban por carretera. Es cierto que, aunque lluevan las alertas, muchos viajeros se arriesgan por muy diversas razones personales.

¿Qué hacer o dónde reclamar, según el medio de transporte que nos ha fallado? Lo primero y más importante es valorar si antes del viaje se disponía de información clara y suficiente, tanto por parte del organismo competente en el sector, como de las compañías de transporte (vuelos, carreteras o autopistas.)

En cuanto al transporte terrestre, las reclamaciones económicas por incumplimiento de contrato se deben realizar ante las Juntas Arbitrales del Transporte, siempre que el lugar de origen o destino del transporte realizado o de la celebración del contrato estén situados en el territorio donde las juntas son competentes: la de Araba tiene competencia en este herrialde; la del País Vasco, en Bizkaia y Gipuzkoa. Resuelven reclamaciones de transporte terrestre (por carretera, ferrocarril...) sea urbano, interurbano o internacional; de mercancías o de viajeros.

En cuanto a las quejas por el funcionamiento del servicio, las de transporte interurbano se deben realizar ante la Diputación correspondiente, y ante el Ministerio de Fomento las que corresponden a servicios entre diferentes comunidades autónomas.

En cuanto al transporte aéreo, si es un viaje combinado o paquete vacacional (que incluya alojamiento y otros servicios turísticos) las quejas deben presentarse ante la agencia de viajes o tour operador, cumplimentando una hoja de reclamaciones. Si no se obtiene respuesta satisfactoria, hay que dirigirse a la Dirección de Turismo del Gobierno de Gasteiz. Si, por el contrario, se ha contrado únicamente el transporte, antes de abandonar el aeropuerto hay que rellenar una hoja de reclamaciones ante la compañía aérea o sino enviaremos una carta a su departamento de atención al cliente. Es importante adjuntar copias de los pasajes o facturas, y guardar siempre los originales.