LETICIA ORUE
TENDENCIAS

Hortensia

Podríamos decir que es la primera silla nacida de Instagram. Después de que su render en 3D de un sillón en forma de nube se volviera viral en las redes sociales el año pasado, el diseñador argentino Andrés Reisinger ha hecho realidad el fenómeno de la silla Hortensia con la ayuda de 20.000 pétalos de tela. Reisinger, que trabaja principalmente con software digital creando piezas ficticias, publicó por primera vez la representación de color rosa claro y bulboso en Instagram en julio de 2018. Desde entonces, ha acumulado miles de likes y ha sido compartida en revistas de diseño junto a muebles reales, lo que provocó que hubiera tres pedidos de una silla inexistente. Tras tener tanto éxito podría parecer sencillo fabricarla, pero Reisinger tardó seis meses en encontrar colaboradores que estuvieran convencidos de que esta textura podría replicarse en la vida real. «Gracias a Júlia Esqué, diseñadora de productos especializada en textiles, creamos un proceso de producción completamente nuevo para hacer la silla», cuenta Reisinger. Ahora, después de un año de investigación y desarrollo, la versión real de la silla Hortensia se exhibe en la galería Montoya de Barcelona. www.instagram.com/reisingerandres

 

 

Tatu

Es una de esas piezas que tienen vida. La historia de Tatu comenzó en un vuelo transoceánico, entre una lectura sobre la fauna argentina y la medi tación sobre la lamparita de su asiento, cuyo flujo de luz no perturbaba el sueño de su esposa. Así fue como André Ricard se propuso diseñar esta lámpara, que poco después se convertiría un icono del pop-art en Europa. El tatu o armadillo es un simpático mamífero provisto con un caparazón dorsal que le defiende cuando se recoge sobre sí mismo. Tatu remite a una época desenfadada, cuando las clases medias europeas llegaron al gran consumo y sus hijos se atrevieron a una revolución estética descomunal, donde todo se contorsionaba, todo podía expresarse de otra manera.

Después de casi cincuenta años, Santa & Cole reedita este clásico y lo hace mejorando sus posibilidades lumínicas. El cuerpo mecánico de Tatu, como un flexo compacto, fue concebido en tres secciones que pueden rotar independientemente para adecuar su uso a un estante, un escritorio, la mesita de noche o incluso como aplique de pared. Esta nueva versión incorpora un LED, fácil mente adecuable en intensidad lumínica, y una lente convergente desplazable, que amplía o reduce la apertura focal de una fuente mucho menos calurosa y muchísimo más longeva. www.santacole.com

 

Hebra

Minimalista y versátil. Así presentan los daneses Muuto su nueva colección de lámparas Strand, diseñada en colaboración con el británico Benjamin Hubert, de Layer. Tan refinada como cabría esperar, la colección Strand se inspira en la naturaleza. Más específicamente, en la forma y la sensación de nube del capullo de un gusano de seda. Las cinco lámparas colgantes que componen la colección presentan un marco de acero bellamente diseñado que brinda soporte a un material innovador. Al igual que el gusano teje hilo a hilo el capullo de seda en el que experimentará su metamorfosis, la fina tela de polímero que recubre la lámpara es rociada sobre el marco de acero a medida que gira, creando un tono delicado, casi etéreo. Esta ingeniosa técnica también asegura que se emplee una cantidad mínima de material en su fabricación. Las lámparas vienen en versiones cerradas o abiertas que crean una luz suave y difusa, casi sedosa. www.muuto.com

 

Recogido

A medio camino entre un taburete y un sofá, Scoop es una colección de asientos diseñada por los coreanos Jiyoun Kim Studio que, haciendo honor a su nombre (podríamos traducirlo como “recogido”), viene a llenar el vacío entre estas dos piezas. Scoop se presenta como un asiento que nos permite adoptar una postura fácil al sentarnos, a medio camino entre lo confortable y lo erguido, sin la necesidad de contar con un respaldo exagerado. De presencia monolítica y forma sencilla, está delicadamente acabado en cuero natural de alta calidad y disponible en una amplia variedad de distintos tonos, perfectos para recoger culetes en cualquier tipo de espacio. www.jiyounkim.com

 

 

El plumífero indestructible

Muchos atribuyen una relación directa entre llevar la misma ropa todos los días al incremento de la productividad. A Steve Jobs no le fue nada mal el negocio con sus vaqueros y el polo de cuello vuelto diseñado por Issey Miyake y, para Zuckerberg, llevar siempre una camiseta o sudadera gris forma parte de su estilo de vida basado en el Life Hacking, o como él lo explica: «Aclarar mi vida para hacerla sencilla. Siento que no estoy haciendo mi trabajo si gasto energía en cosas tontas y frívolas sobre mi vida», explica. Frivolidades o no aparte, reducir nuestro armario y comprar prendas para toda la vida no parece una idea tan descabellada, sobre todo pensando en el dinero que nos ahorraríamos si tuviéramos una chaqueta “indestructible” fabricada en dyneema, la fibra más fuerte del mundo, quince veces más fuerte que el acero. Pensada para trabajos pesados, como amarrar satélites desde el espacio o buques portacontenedores gigantes, este abrigo “indestructible” también sirve como armadura protectora, ya que soporta daños extremos, como cortes y cuchilladas. Diseñado para sobrevivir a su propietario, aprovecha la sensibilidad a la temperatura del material: cuanto más frío hace, más fuerte se vuelve la chaqueta. Su precio ronda los 800 euros. www.vollebak.com