Con el lanzamiento de “Luster”, su segundo álbum bajo el prestigioso sello 4AD, la artista irlandesa Maria Somerville se consolida como una de las voces más singulares del dream-pop contemporáneo. Publicado el pasado mes de abril, este álbum de nueve canciones es una exploración íntima y audaz de la identidad, el retorno al hogar y la conexión con la comunidad creativa. “Luster” no solo reafirma el talento de Somerville, sino que la posiciona como una artista innovadora en un género que ella moldea con una perspectiva personal creando texturas sonoras envolventes.

El álbum se sumerge en la idea de regresar a los orígenes. Somerville, quien creció en el condado de Galway, utiliza su nuevo disco para explorar qué significa volver al lugar que la formó, no con nostalgia, sino con una mirada crítica y madura. Destaca su habilidad para entrelazar letras introspectivas con paisajes sonoros que evocan tanto la costa irlandesa como los clubes nocturnos de Dublín.

El objetivo primordial en este trabajo ha sido el de trascender las fórmulas habituales del shoegaze y el ambient, subrayando el enfoque colaborativo de Somerville, quien ha trabajado con músicos y productores locales para dar vida a este proyecto. Algo que dota al disco de autenticidad.

El núcleo temático gira en torno al regreso al lugar de origen, un concepto que Somerville aborda con una mezcla de nostalgia y cuestionamiento. Canciones como “Drift” y “Hearth” combinan sintetizadores con percusiones sutiles, evocando tanto los paisajes costeros de Irlanda como los pulsos de la vida urbana. Somerville muestra una habilidad para construir puentes entre lo tangible y lo intangible. Las texturas del álbum, que recuerdan a grupos como Cocteau Twins y Boards of Canada, crean una experiencia inmersiva que invita a la introspección.

También cabe destacar la cuidada producción que aporta el trabajo. Somerville, conocida también por sus sesiones como DJ en NTS Radio, incorpora elementos de electrónica minimalista dando al disco una calidad cinemática. El uso de reverberaciones y capas vocales crea una sensación de estar suspendido en el tiempo. Líricamente muestra una evolución notable en el trabajo de Somerville. Sus letras, aunque poéticas, son más directas que en su debut, “All My People” (2019).

En el panorama musical de 2025, “Luster” se sitúa en un momento de resurgimiento del dream-pop, con artistas como Beach House y Slowdive a la cabeza. Sin embargo, Somerville se distingue por su conexión con la escena irlandesa y su habilidad para fundir su música con una identidad local sin caer en estereotipos. Su trabajo en NTS Radio y su colaboración con artistas de Dublín, la han convertido en una figura influyente en la música alternativa. Esta es una obra que combina introspección, experimentación y una narrativa poderosa sobre el retorno y la identidad.

Julien Baker & TORRES

El dúo Julien Baker & TORRES publica su álbum debut “Send A Prayer My Way”, una joya del country alternativo que fusiona raíces sureñas con narrativas queer. Un trabajo que rebosa autenticidad y emotividad. Cargado de letras sobre adicciones y redención, así como otras que abordan el rechazo religioso con un toque de humor negro. La producción, que destaca el sonido de la pedal steel y el banjo, evoca a artistas como Lucinda Williams, pero el enfoque personal de Baker y Scott redefine el género. Aunque no reinventan nada nuevo, el disco es un testimonio de resiliencia y amor, conectando con el oyente que busca sin filtros historias crudas a la vez que humanas.