joseba Eizagirre
MOTOR

Máxima precaución con lluvia

Conducir en invierno implica cambiar una serie de hábitos y adoptar más precauciones de lo habitual. Todos los años se repiten las recomendaciones –también en estas páginas– para mejorar la conducción sobre nieve o hielo, pero basta salir a la carretera un día de lluvia para comprobar la cantidad de imprudencias que se cometen. No olvidemos que la lluvia es el fenómeno meteorológico que más accidentes provoca.

En primer lugar, llama la atención la falta de adecuación de la velocidad al estado de la carretera. En días de lluvia intensa, es habitual encontrarnos con coches que circulan al máximo de la velocidad permitida y «pegados» al vehículo que les precede, lo que no puede calificarse de otra forma que de temeridad. Lo mismo ocurre con el freno, que muchos conductores utilizan igual que si circularan sobre asfalto seco.

Cuando el piso está mojado, la adherencia de los neumáticos se reduce considerablemente –incluso con ABS– y ello puede llegar a comprometer la estabilidad del coche. Por lo tanto, si nos vemos obligados a frenar a fondo, las probabilidades de tener un percance son altísimas. Además, aunque los neumáticos estén en perfecto estado, hay que saber que tienen una determinada capacidad de evacuación de agua a través del dibujo y, cuando la sobrepasamos, podemos perder totalmente el control del coche. Es lo que se conoce como aquaplaning, ante lo que solo cabe sujetar con fuerza el volante y esperar a recuperar el contacto con el suelo.

Todo ello, sin olvidar que la lluvia reduce considerablemente la visibilidad, de tal forma que nuestro campo de visión es menor, sobre todo si circulamos detrás de otro vehículo.

Por lo tanto, la clave para circular seguros es moderar la velocidad, aumentar la distancia de seguridad y no realizar movimientos bruscos con el volante o el freno. En descensos prolongados, para reducir la velocidad conviene utilizar el freno motor y olvidarnos de pisar el pedal.

En cualquier caso, la mejor forma de comprobar la pérdida de adherencia es hacer uno mismo la prueba, forzando una frenada brusca o una curva muy cerrada sobre el piso mojado, eso sí, fuera de las carreteras principales. No hay como experimentar por unos instantes la sensación de pérdida de control del coche para no cometer después imprudencias.

Híbridos para Dbus

La Compañía de Tranvía de Donostia continúa con su plan de sustitución de los autobuses diésel más antiguos y contaminantes a través de la adquisición de nuevos vehículos propulsados por energías más limpias. Así, a la llegada el pasado verano del autobús 100% eléctrico, se suma ahora la incorporación de cinco vehículos híbridos, similares a los cuatro que puso en marcha hace un año la Diputación para los servicios interurbanos de Lurraldebus.

El modelo elegido es el Solaris Urbino Hybrid 12, que combina la propulsión eléctrica con la diésel, lo que reduce los consumos con respecto a los autobuses retirados en un 25-30%, así como las emisiones contaminantes en una cifra estimada de 225 toneladas anuales de CO2. Los nuevos autobuses están equipados con baterías de ion-litio y sistema start-stop, de manera que el vehículo funciona exclusivamente en modo eléctrico en las paradas, sin emitir gases ni contaminar acústicamente el entorno.

Además, gracias a su función de regeneración, el motor aprovecha la acción de frenado para generar electricidad y recargar las baterías de propulsión, lo cual permite una frenada más suave y un mayor aprovechamiento de la energía.

Los nuevos autobuses, de doce metros de longitud, cumplen con todas las exigencias en cuanto a accesibilidad, confort y seguridad, y son 100% accesibles con piso bajo y rampa de acceso al espacio para dos sillas de ruedas. Cuentan además con sistema de arrodillamiento para igualar la altura del piso del vehículo a la parada, facilitando así el acceso de personas con dificultades de movilidad y sillas de bebé.

Las matriculaciones de coches híbridos crecen un 48,5%

El año pasado se matricularon en Hego Euskal Herria un total de 612 vehículos híbridos (que combinan la propulsión de gasolina con la eléctrica), lo que supone un crecimiento del 48,5%, frente al aumento del 18,2% registrado en el Estado español. Los vehículos eléctricos (como el BMW i3 de la imagen) también experimentaron un fuerte incremento, de casi el 59%, aunque su venta sigue siendo testimonial, ya que en todo el año se vendieron 62 unidades. En Nafarroa, por ejemplo, solo se matricularon seis unidades, pese a los programas de incentivos al vehículo eficiente (PIVE) puestos en marcha.

Uno de cada cuatro Smart vendidos en EEUU es eléctrico

Uno de cada cuatro coches de dos plazas de la marca Smart vendidos en Estados Unidos ya es eléctrico, según informa el grupo Daimler AG, que añade que tras cinco años desde su lanzamiento en China, esta región se ha convertido en el segundo mercado más importante. El lanzamiento el pasado mes de noviembre de los nuevos Smart de dos y cuatro plazas está obteniendo una buena aceptación por parte del público, que busca alternativas para la movilidad urbana a través de modelos compactos y ágiles y, en muchos casos, impulsados por energía eléctrica. Daimler se muestra esperanzada en que el interés por este tipo de coches vaya en aumento.

Audi prueba ahora la conducción autónoma en largo recorrido

Después de poner a prueba la conducción autónoma en circuito, Audi ha realizado un recorrido de 885 kilómetros por autopista para demostrar la eficiencia de su sistema de pilotaje sin conductor en condiciones de tráfico reales. El vehículo utilizado ha sido un Audi A7 Sportback, que ha recorrido sin incidencias la distancia que separa Silicon Valley (California) y Las Vegas (Nevada), donde quedaba expuesto en el certamen CES 2015 dedicado a la electrónica de consumo. Este vehículo utiliza una combinación de diversos sensores, muchos de ellos listos para su producción en serie.

Honi buruzko guztia: MOTOR