Al paro

Pedro Sánchez es un robot. Y tiene pasado, no solamente como jugador de baloncesto, sino como persona en el paro. Hace apenas cinco años estuvo en el paro como exdiputado. Lo reconoció en una entrevista de carril, en “La Sexta noche”, en la que no le dejaron estar a Francisco Marhuenda, pero le pusieron a Eduardo Inda, que es un toro manso y afeitado siempre que tiene delante alguien que le puede ayudar a mantener sus mentiras alucinadas con publicidad. Hacía muchos sábados que me cuidaba de aburrirme con los gritos, gestos y consignas de los de siempre, pero quise ponerm e al día, y me puse a la noche. Hay cerca de sesenta exdiputados, entre ellos Eduardo Madina, Rafael Larreina y alguna exministra que van a pedir el paro o indemnización del propio Congreso durante dos años. Un paro especial, con algo así como dos mil ochocientos euros por mes. Siguen siendo unos privilegiados, que abusan de las leyes que ellos mismos se han aprobado para mantenerse en lo más alto, siendo de lo más bajo, éticamente. Pierdes las elecciones, pero sigues cobrando del sistema, ¿cómo van a querer cambiar nada?

Cada vez que este hombre aparece en las teles más se le nota que está viviendo en una nube, que está presentándose como un salvador de no sé sabe qué, que insiste en vender su pacto con Ciudadanos como progresista y reformista, que va por encima de sus posibilidades intelectuales, políticas, partidarias, conceptuales y que sabe que si se va a elecciones es más que posible que no encabece las listas de su propio partido. Sería un desastre verle presidiendo un consejo de ministros y con Albert Rivera de vicepresidente. En las redes le llaman “Primo de Rivera”. ¿Estamos ya en campaña electoral? Van apareciendo sistemáticamente en los medios encuestas partidarias como grandes mentiras publicitarias.