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Derechos del colectivo LGTB en el mundo


 

A la vanguardia internacional

Canadá está considerada a nivel internacional como un líder en la defensa y promoción de los derechos LGTB. En los últimos años se ha progresado en todo, desde la salud hasta el derecho a adoptar. La aceptación social y la igualdad legal formal de este colectivo se ha convertido en mainstream: ocupa el carril central de la política.

 

Una ley para dejar de estar a la cola

La influencia de la Iglesia católica es enorme y su posición oficial es la aceptación del homosexual y el rechazo de sus actos. Hasta ahora esa era la normalidad en Italia, que no tenía legislación específica contra la homofobia, ni permitía el matrimonio homosexual. Forzada por el Tribunal de Estrasburgo, ha aprobado una ley que permite las uniones civiles.

 

Homofobia para ganar las elecciones

El partido ultraconservador Ley y Justicia, con su visión homofóbica radical que compara homosexualidad con «pedofilia, necrofilia y zoofilia», gana elecciones con mayoría absoluta. Veta cualquier reforma que reconozca las relaciones homosexuales o a los transexuales, y se opone a legalizar matrimonios y adopciones entre personas del mismo sexo.

 

La Iglesia ortodoxa georgiana, al ataque

El patriarca de la Iglesia ortodoxa georgiana, Iliá II, además de mandar a numerosos sacerdotes a atacar manifestaciones por los derechos del colectivo LGTB, ha declarado oficialmente el 17 de junio como el Día de la Defensa de la Familia. Mientras tanto, el Parlamento quiere precisar en la Constitución que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer.

 

Unos medianoche, otros mediodía

Fuera del matrimonio heterosexual, la actividad sexual está prohibida. La homosexualidad es un delito castigado con prisión, castigo corporal o la muerte. La transexualidad es legal si conlleva una operación de cambio de sexo. Irán hace más operaciones que cualquier otro país en el mundo tras Tailandia. Estas cirugías están financiadas en parte por el Estado.

 

La homofobia, ese ogro monstruoso

El balance es desolador: el Gobierno prohíbe la «propaganda homosexual» y la adopción de niños por homosexuales extranjeros. Estudia impedir a los homosexuales donar sangre y retirarles la patria potestad. Ultras atacan impunemente a homosexuales y el 74% de los rusos considera que la homosexualidad no debe ser aceptada por la sociedad.

 

Clínicas de «conversión sexual»

Aunque el colectivo LGTB está ganando algunas batallas en los tribunales contra la discriminación de los transexuales o la legalización del matrimonio homosexual, salir del armario es peligroso en China. Solo un 5% lo hace. El estigma es grande y las clínicas de «conversión sexual» que prometen curar la homosexualidad, con descargas eléctricas, muy numerosas.

 

Más discriminación en nombre de la «libertad religiosa»

Los derechos LGTB en EEUU han experimentado grandes avances, en muchos casos tras sentencias del Tribunal Supremo, aunque su plasmación varía de estado a estado. En medio de una gran polémica, Carolina del Norte y Misisipi acaban de aprobar leyes discriminatorias que impiden el acceso a baños públicos a los transexuales o niegan servicios a parejas gays si se hace en nombre de la religión.

 

Hacia una conciencia que cambie actitudes

A veces da la sensación de que la ley va por delante de la sociedad. Porque también en Euskal Herria se producen aún actitudes machistas, de transfobia y homofobia. Y sigue siendo necesaria una conciencia que cambie actitudes y haga desaparecer prejuicios sobre el colectivo LGBT, realizando los cambios necesarios en educación, salud, comunicación o en la libertad de las personas.

 

La nueva revolución se abre paso

Cuba ha progresado mucho en temas relativos a la comunidad LGTB, aunque en zonas rurales la homofobia y transfobia son aún un gran problema. Cambiarse de sexo es legal y gratuito, pero el matrimonio homosexual, no. Fidel Castro persiguió a las minorías sexuales enviándolas a campos de trabajos forzados. Hoy, la hija del presidente Raúl Castro, Mariela, es la mayor impulsora de los derechos LGTB.

 

Líder del continente en inclusión LGTB

Según publica el medio político y financiero americasquaterly.org, atendiendo a la permisividad de la homosexualidad, las leyes contra la discriminación y las orientadas a regular relaciones, así como las que protegen al colectivo LGTB ante crímenes de odio, Uruguay lidera la calificación de países americanos, por encima de EEUU, en el apoyo al colectivo LGTB.

 

Ejecución inmediata de homosexuales

En los territorios controlados por el Estado Islámico, según su particular interpretación de la Sharia, la homosexualidad implica una ejecución inmediata. Como han mostrado en decenas de vídeos que circulan por las redes sociales, las personas homosexuales son arrojadas desde los tejados ante una multitud. Y en el caso de no morir, son lapidadas hasta la muerte.

 

Salir del armario e ir a una ejecución segura

Los derechos LGBT no son reconocidos en Arabia Saudí. Las costumbres y leyes están muy influidos por las costumbres tribales y el ultraconservador wahabismo. La homosexualidad y la transexualidad son actividades inmorales e indecentes. Se castiga los actos de homosexualidad o el travestismo con la muerte, cárcel, multas y castigos corporales.

 

El infierno de la sexualidad disidente en África

No ser estrictamente heterosexual en África es duro y, a veces, terrible. Con presidentes que consideran la homosexualidad una «peste» a combatir como los mosquitos de la malaria; con lesbianas que denuncian la habitual mutilación genital o gays que relatan la tortura del «examen anal», normal en las comisarías; o con leyes superrepresivas como en Nigeria y con zonas donde existe la pena de muerte, todo queda dicho.

 

Pub(l)ikoA

ARIANE KAMIO

Egin dezagun eztabaida pubikoa publiko. Pubikoa, generoen araberakoa baita egun pareta arteetan egiten den bereizketa bakarra. Zakil/alu pubiko ez publikoak. Pubis sexatuak. Gogoeta ankerrak. Eztabaida antzuak.
Baina esan, irakurle, zenbat aldiz sentitu duzun nazka bi mutiko musuka ikustean. Zenbat aldiz bultzatu zaituen indar ezkutu batek homosexualitateaz pentsatzera, zenbatetan egin diozun izkin marikoi bati eta zenbatetan itxi duzun ipurtzuloa, arnasari ezin eutsi. Aitor ezazu noiz edo noiz aritu zarela zirkulu itxietan gaiaz gaizki esaka, ez ulertuarena egiten, eta hobengabetasunetik ustez egindako galdera pozoitsuak jaurtitzen. Nahiago duzu zure oinordekoa homosexuala izango ez bada; eta badakizu.
Legea alde dugula esango dute. “Ezkon zaitezkete, umeak eduki ere bai”. Jakina. Eta bi ama izango ditu, edo bi aita, familia koloretsua baita, Pirritx eta Porrotxen abestietan bezala. Baina laster ohartzen gara, gu, zakur berdeok, estralurtarrena dela etxetik barrura dugun eredua eta “normaltasun”, “askatasun” edo modako hitzetatik bereziki urrun dagoela gure seme-alaben etorkizun gertua. Eta jakin, hau ez dela zigor zutabe bat, ez aurpegiratzeko asmoz idatzitako egia zerrenda ere, errealitatearen argazki sinpleena baino ez. Edo ez zara ohartu zer mugitzen den pentsamendu pub(l)iko bakoitzaren baitan?