2016 URR. 28 BALONCESTO - EUROLIGA Olympiacos se lleva el asalto 34 del «clásico» Saski Baskonia peleó, pero se enfrentó a un rivalque tiró de Spanoulis, Mantzaris y Green para ganar. Arnaitz GORRITI SASKI BASKONIA 90 OLYMPIACOS 95 Debutaba Rodrigue Beaubois en la presente Euroliga, al tiempo que Sito Alonso confirmaba el fichaje de Chase Budinger, después de que los Brooklyn Nets lo hayan cortado, hasta el final de la temporada. Estas distracciones, más la ausencia de Bargnani, apenas difuminaban otro partidazo ante Olympiacos, todo un clásico de la competición europea. En el asalto 34 entre gasteiztarras y helenos, el triunfo cayó del lado griego. Con excesivos parones de la mesa de anotación –hubo un problema al anotársele un triple de más a Olympiacos, algo que se corrigió al descanso–, pero el choque tuvo ritmo. Sobre todo por parte local, que atacó con la idea de agarrar desprevenida a la defensa de Olympiacos, mientras que Spanoulis generaba a partir del bloqueo directo central y el rebote ofensivo. Y con ritmo siguió, sobre todo por parte gasteiztarra. Voigtmann se vio muy eclipsado por el poderío interior de Olympiacos, pero Shane Larkin se bastaba para brillar con luz propia merced a la velocidad de sus acciones. Y el propio Beaubois, a pesar de cargarse de faltas, dio también una pequeña muestra de sus habilidades, desbordando a sus respectivos pares con un par de entradas eléctricas. De una forma u otra, Saski Baskonia llegó a rozar la decena de renta, en el 40-31, así como en el 47-39, en una primera mitad con una anotación bien alta. Claro que Olympiacos, con su habitual capacidad de seguir vivo, se aferraba al duelo. En primer lugar, por los rebotes. Segundo, por los tiros libres, enervando al personal que llenaba el Buesa Arena. Además, Spanoulis y Lojeski cerraron la primera mitad a golpe de triple, llegándose al descanso con un inmerecido 52-47 para los de Sito Alonso, inmerecido porque el peso anotador y del ritmo fue suyo. La peor noticia, por otro lado, fue que Larkin cometía la tercera falta antes del descanso. Nunca dejes de creer No puede entenderse un partido ante Olympiacos sin padecer un momento de flaqueza. Este momento llegó en el tercer período, cuando la escuadra del Pireo se marchaba 64-70, después de una técnica pitada sobre Kim Tillie, tras un evidente gesto de frustración del francés. Todo ello llegaba tras una racha triplista de Olympiacos, especialmente de Mantzaris, que se aprovechaba de la capacidad de atracción de las defensas de un Spanoulis que había decidido ser el rey de este clásico. Pero el Baskonia se levantó. Canasta de seis metros de Diop, triplazo de Akognon y Larkin que elevaba el 74-72 sobre la bocina, después de provocarle una pérdida al «mago de Larissa». No quedaba otra que creer, porque el equipo gasteiztarra creía y mantenía la ilusión intacta. Ese «chute» de ilusión lo personificaba Diop, jugando los mejores minutos de la temporada, y ayudando a mantener al Baskonia por delante. Pero Olympiacos, con Spanoulis en el banquillo, encontraba en Lojeski y Green los ejecutores de un rival que se disponía a poner la directa y se escapaba 80-85, obligando a Sito Alonso a parar y darle aire a Larkin. Pero Hackettt, inesperadamente, clavaba un triplón: 80-88. Olympiacos no terminaba de rematar el partido y Voigtmann le daba algo de aire al Baskonia con cinco puntos: 87-90. Los gasteiztarras pudieron empatar, pero erraron, y Green, culminando una jugada en la que Olympiacos tardó más de 8 segundos en cruzar de campo, sentenció con un «tres más uno». El asalto 34 culminó con derrota, pero peleando. Pau Ribas se perderá toda la temporada Se acabó la temporada 2016/17 para el escolta del Barcelona y ex del Baskonia Pau Ribas. El badalonés se lesionó el miércoles en el partido frente al Estrella Roja y las pruebas confirmaron que sufre una rotura completa del tendón de Aquiles de su pie izquierdo, con lo que será baja no menos de seis meses. En el resto de la jornada, en el arranque del segundo capítulo de la semana, destacaron los inútiles 36 puntos de Keith Langford, inútiles porque Unics Kazan ca&bs;ía por un claro 98-80 ante un intratable CSKA de Moscú, mientras que en el «derbi» de Estambul, Anadolu Efes sumó su primer triunfo, después de batir a Darussafaka por 79-84 previa remontada, con un Bryce Cotton providencial. En Milán, el Real Madrid se resarcía ganando por 90-101. A.G.