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PRIMERA FEMENINA

Un representante menos tras una temporada pobre en satisfacciones

Sólo la Real, con su reacción en la segunda vuelta, ha conseguido su objetivo clasificándose para la Copa. ElAthletic se alejó pronto de la pelea por el título y el Oiartzun consumó el descenso en la última jornada.


Un bajón en toda regla. Tras la espectacular campaña pasada, que se saldó con el triunfo del Athletic, la mejor temporada en la historia de la Real y la permanencia, con más holgura de la previsible, del Oiartzun, la moneda ha ofrecido su otra cara en la Liga que acaba de concluir.

Sólo la Real, y a duras penas –ha conseguido el billete copero pero no ha alcanzado el puesto del curso anterior, que también se contaba entre sus metas–, ha alcanzado su objetivo, algo que no han podido hacer Athletic y Oiartzun. Tampoco debería considerarse un fracaso, teniendo en cuenta el poderío creciente de sus rivales, además de la maldición interminable de las lesiones, en el caso de las rojiblancas, y las circunstancias del equipo oiartzuarra, que contaba con el presupuesto más parco de la categoría. Fútbol no son matemáticas pero dinero y posición en la tabla suelen estar directamente relacionados.

Gari Argote ni quiere «utilizarlo como excusa» pero admite que es un factor a tener en cuenta. Más aún esta temporada, en la que «se ha notado un paso adelante. El fútbol femenino va avanzando y se nota de año a año, va entrando más dinero, y cada vez hay más clubes profesionales potentes», frente a un Oiartzun que compite con lo justo. «Nuestras jugadoras sólo ven el dinero del kilometraje», recuerda, de ahí que destaque, pese al resultado final, que «lo único que podemos hacer es aplaudirles. Porque lo que se pide es esfuerzo y trabajo y, en ese sentido, no creo que haya muchos equipos como el Oiartzun. Las jugadoras han dado todo lo que tenían, no se han dejado nada, y nuestra valoración tiene que ir por ahí, así que pese al descenso es positiva». No sólo la de los responsables del club. «Creo que la afición también lo ha entendido así, no hay más que ver cómo aplaudieron el domingo al equipo al final del partido, pese al golpe del descenso», se emociona el técnico, que reconoce que fue un palo duro pese a que, al contrario de la temporada pasada, el Oiartzun ha tenido durante todo el curso una situación apurada. Algo que ha hecho la Liga «más exigente todavía. Vivir con esa tensión, trabajar cada semana sabiendo que el domingo tienes una final, es muy duro. Y las jugadoras le han hecho frente. En Navidades muchos nos daban por descendidos –recuerda– y las futbolistas sacaron todas sus fuerzas, físicas pero sobre todo mentales, para darle la vuelta a la situación y seguir vivas hasta la última jornada, creo que eso no podemos olvidarlo tampoco».

De menos a más

También la Real ha ido de menos a más, aunque en su caso el gran momento de forma que ha exhibido en las últimas semanas le ha permitido escribir un final feliz a la temporada. No ha podido alcanzar la quinta plaza del año pasado pero al menos ha logrado uno de los billetes coperos, su principal objetivo, que no parece poco viendo la irregularidad que caracterizó su andadura durante los primeros meses de competición.

De ahí que Igor San Miguel también subraye «la reacción» que protagonizó su equipo mediado el curso. Tras un primer tramo de la Liga «en el que no nos salieron las cosas. Por ningún motivo en concreto y por muchos a la vez, incluso las comparaciones con la temporada anterior que fue tan buena, las bajas por el Mundial sub17, la dificultad para voltear las malas dinámicas..., la primera parte de la temporada no fue buena». Pero el equipo «tuvo paciencia y confianza. Creyó en su trabajo y, aunque los resultados no acompañaban, siguió trabajando de la forma que sabíamos correcta», destaca, y así llegó una remontada que le ha permitido no sólo concluir en la octava posición, sino además hacerlo ofreciendo muy buenas actuaciones. «Hemos cogido una racha buena, marcando los goles que antes nos habían faltado, compitiendo muy bien contra rivales muy complicados...», recuerda el entrenador txuriurdin –que no seguirá la próxima temporada–, para el que la imagen que ha ofrecido la Real estos últimos meses es mucho más acorde a la realidad del equipo donostiarra que la de la primera vuelta. «Yo creo que ese sí es el nivel del equipo, para estar con los de arriba, si no ganando, sí teniendo posibilidades de hacerlo con los rivales más potentes, compitiendo de tú a tú con ellos...».

Descolgado de inicio

Un aspecto que también se le ha dado mejor en la segunda vuelta al Athletic. El equipo rojiblanco, que venía de ganar su quinto título de Liga, ha vivido una temporada ciertamente complicada «para un equipo acostumbrado a pelear siempre por lo máximo, lo que hace muy difícil encontrar motivaciones cuando te quedas fuera de esa pelea», reconoce Joseba Agirre.

Y lo cierto es que, esta vez, se alejó muy rápido de los equipos que, a la postre, han peleado por el título. Las lesiones, una vez más, o un mal arranque que coincidió con la sobrecarga del calendario por la disputa de la Champions, lastraron a las rojiblancas. Es posible, viendo la situación actual del fútbol femenino en el Estado español, que lo excepcional fuera lo del curso pasado –«fue muy meritorio porque quedar primero, de la forma que lo hicimos y con los rivales que lo hicimos, tiene mucho mérito; quizá ahora nos demos cuenta», reflexiona Agirre–, pero el técnico también cree que «deberíamos haber acabado más arriba» que la quinta plaza.

En todo caso, Agirre subraya su «satisfacción» porque «las jugadoras no han bajado nunca los brazos».

Campeón inédito

Nadie ha podido hacerlo, de hecho, en una temporada que se ha resuelto sobre la campana. Uno de los puestos de descenso se decidió en la penúltima jornada con la derrota del Tacuense, que baja un año después de subir. El otro, que lamentablemente envía al Oiartzun a Segunda, y el título no lo hicieron hasta el último partido.

Coronó al Atlético de Madrid que, un año después de estrenar su palmarés con la Copa y de debutar en competición europea, añade su nombre a la lista de campeones de Liga –que, con el subcampeonato del Barcelona, mantiene al Athletic como líder en solitario con cinco títulos–, tras firmar una temporada inmaculada y viendo así recompensada, tanto la fuerte apuesta económica del club colchonero por su sección femenina, como la dedicación de su presidenta Lola Romero durante tantos años. El equipo de Ángel Villacampa y Natalia Astrain –la avarra se unía el pasado verano al cuerpo técnico colchonero como segunda entrenadora–, el único que no ha encajado una sola derrota, ha aventajado finalmente en tres puntos al Barcelona. Subcampeón por segundo año consecutivo, el equipo culé, cuyo banquillo abandona el técnico de todos sus éxitos Xavi Llorens, ha enjuagado su desilusión liguera con una gran actuación en la Champions, donde alcanzó las semifinales.

Valencia y Barcelona, duros escollos coperos para Athletic y Real

Ya hay emparejamientos para los cuartos de final de la Copa, que se disputarán en San Sebastián de los Reyes: Real-Barcelona y Athletic-Valencia el 3 de junio y Atlético-Rayo, UDG-Levante un día después.

La Real, que abrirá la competición (10.00 horas), se enfrenta así a su eterno verdugo copero. En sus tres participaciones previas, la Real ha caído ante el Barcelona: a la primera el año pasado y en 2014, y en semifinales en 2011, el año de su debut, tras haber superado a Valencia y Sant Gabriel en las rondas anteriores.

El Athletic, por su parte, se enfrentará a un Valencia (12.30) con el que se ha medido en dos ediciones previas: en 2015, el cuadro valencianista apeó a las rojiblancas en cuartos y un año antes fue el Athletic el que ganó, también en cuartos. Posteriormente eliminaría al Levante para acabar cayendo en la final, en la tanda de penaltis, frente al Barcelona. Fue la segunda y, de momento, única final que han alcanzado las vizcainas en sus 14 participaciones.

Semifinales y final se disputarán los días 16 y 18 de junio en Las Rozas. A.U.L.

Astea

Internacional. Las jugadoras del Athletic Ane Azkona, Damaris Egurrola, Lucía García, Maite Oroz y Andrea Sierra viajan mañana Hungría con la selección española sub’19. Competirán con las anfitrionas, Rusia y Bélgica por una plaza en el Europeo.

Renovación. La Real sigue trabajando en la configuración de su plantilla. Iraia Iparragirre y Manu Lareo han sido las últimas en renovar su contrato con el club txuriurdin, hasta 2019.

Banquillos. A la marcha ya conocida de Igor San Miguel de la Real se le ha unido la de Christian Toro, que deja el Valencia tras cinco temporadas y media. Es el principal candidato a sustituir a Xavi Llorens en el Barcelona. También hay relevo en el Olympique, con la marcha de Gerard Precheur a final de temporada. Le sustituirá Reynald Pedros, que ha firmado por dos temporadas.

Segunda. Además del San Ignacio, también el Oviedo Moderno quedó apeado del play-off de ascenso a Primera tras caer goleado ante el Femarguín (5-0). Las canarias pelearán por una plaza en Primera con el Sevilla a doble partido. En el Grupo 2, el Madrid logró su segundo triunfo, esta vez ante el Seagull (1-1) y se acerca a Primera.

Título. El empate con el Twente aplazó la celebración una semana pero el Ajax de Eli Sarasola sí pudo con el Den Haag (2-1) en la última jornada y se adjudica la Eredivisie holandesa.

Doblete. La Copa francesa también es para el Olympique. El campeón de Liga se impuso en los penaltis al PSG, que se había adelantado en el marcador pero vio cómo las lionesas empataban en la segunda parte. Ambos equipos volverán a enfrentarse el 1 de junio en Cardiff por el título de Champions.

Pionera. Bibiana Steinhaus se convertirá la próxima temporada en la primera colegiada que arbitre en la Bundesliga masculina.

Cromos. La casa Panini ha lanzado una colección de cromos de la próxima Eurocopa femenina.