La expectación no va ligada a la polémica con el material

Aunque haya quien opine lo contrario, la final entre Olaizola II y Altuna III también sirve para echar al traste ese tópico que habla de que las finales necesitan «salsa» con el material para crear expectación.

Elección de guante blanco la de ayer en el Bizkaia de cara a la final del Manomanista, nada que ver con las de los últimos años, cuando Mikel Urrutikoetxea y Oinatz Bengoetxea mostraron su enfado por el material, dos pelotas que finalmente Iker Irribarria no apartó hace dos años y una que sí puso en juego el de Arama en la edición de 2017. Paralelamente, el día que se llevaron a cabo esos apartados de pelotas, los taquilleros de las empresas contaban con 500 y 400 entradas a la venta, mientras que las 3.000 localidades para este domingo estaban agotadas a las pocas horas de que se supiera la identidad de los dos finalistas. De ahí se puede deducir que, cuando el producto atrapa a los pelotazales, la expectación no tiene que ir ligada a la polémica, aunque dándole la vuelta al argumento, la polémica sí que puede ser utilizada cuando la expectación no llega para llenar el Bizkaia.

En esta ocasión, lejos de recibir críticas, la labor de intendetes y seleccionador de material, Martín Alustiza, fue alabada por los dos aspirantes que, eso sí, exprimieron al máximo el tiempo que disponen para realizar su elección, especialmente en el caso del de Goizueta, pero porque todo era de su gusto. «Sin ningún problema, me han gustado mucho y eso que he agotado todo el tiempo, pero porque tenía dudas entre una y otra. He probado las de Jokin y también son muy bonitas».

El de Asegarce, que se decantó por dos cueros de 106,5 y 104,4 gramos, no vio demasiadas diferencias entre las suyas y las de Jokin Altuna, que sí vio que una de las de su rival era quizá «algo más viva, pero que no coge excesivo bote, por lo que no hay ningún problema».

Es más, el amezketarra señaló que el lote de cara a la final «me ha gustado más que el de la semifinal. Entonces las pelotas eran bastante diferentes y hubo dos que no me gustaron nada. Hoy, en cambio, todas las pelotas me han gustado mucho, no muy vivas ni muy bajas, son pelotas para jugar y creo que no es fácil su labor, tantos partidos, algunas veces aciertan más que otras pero con lo de hoy me voy muy a gusto».

Nuevo sistema

A fin de evitar polémicas, las empresas llevan un tiempo empleando la fórmula de apartar las pelotas con antelación a que se sepa la identidad de los contendientes, una fórmula que, por ejemplo en las semifinales del Parejas, mostró muchas grietas, pero que esta vez parece haber funcionado.

En este sentido, Aimar Olaizola apuntó que «antes también ya dije que con este sistema las cosas están parecidas. Lo más importante es que tanto en el Parejas como en el mano a mano, los dos intendentes y Martín Alustiza están haciendo un muy buen trabajo. Hay pelotas muy bonitas y, por lo menos en los partidos que he jugado yo en el mano a mano, las pelotas han sido muy bonitas y hoy también. Al margen del sistema, trabajando de esta manera, el mejor sistema es que haya pelotas bonitas».

En lo que los dos finalistas no estuvieron tan de acuerdo fue en otro clásico de estas elecciones, el cartel de favorito, mochila con la que ninguno de los dos quiso cargar. Aimar Olaizola fue el primero en comparecer y declaró que «para mí el favorito es él. Seguramente él te dirá lo contrario, pero creo que las apuestas están a su favor. Yo nunca le he dado importancia a eso, pero viendo los partidos que ha hecho, que ha ganado primero a Julen, luego a Urruti, que era uno de los favoritos, y luego a Ezkurdia, y de la manera que lo ha hecho, es normal también, pero sin más».

«Conocéis a Aimar, incluso mejor que yo, lleváis un montón de años con él y ya sabíais que iba a decir eso», respondió, entre risas, el amezketarra al preguntarle por lo dicho por su rival. En la ronda de preguntas en castellano incluso tiró de ironía. «No me sorprende, pensaba que iba a decir eso y no me mete presión. Él es una grandísima figura, está haciendo historia y yo, si llego a su edad y tengo que jugar contra un pipiolo de 22 años voy a decir tranquilamente que el favorito soy yo porque tiene mucha más experiencia, en estos partidos vale mucho y lleva muchos partidos a la espalda y hace todo bien, por lo que creo que es favorito», apuntilló el amezketarra, que antes de la elección realizó su último entrenamiento de final previo a la final del domingo.

Los ingredientes están listos, son de primerísima calidad y habrá que esperar a que nos hagan disfrutar el domingo.

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Aunque son varios los que lo ven como favorito, Jokin Altuna dice ver todavía «muy lejos la txapela. Cuando sales por el vestuario y la ves en el pasillo, dan ganas de cogerla e irte a casa, y es que soy plenamente consciente de que tengo una final muy complicada».

La experiencia puede ser uno de los condicionantes, es su primera final del Manomanista tras dos del Cuatro y Medio, pero el de Amezketa dice sentirse tranquilo. «No tengo sensaciones diferentes de las dos finales que he jugado. Al final tratas de prepararte lo mejor posible y antes también ya hemos jugado ante mucha gente, no pienso en eso. Sí que es verdad que cuando estás en el vestuario no escuchas nada y cuando sales a la cancha hay un gran murmullo y un montón de gente. Al principio te impacta, pero a olvidarse de eso. Si pierdes en un día así es por la presión, pero jugamos dos la final, uno tiene que perder y ante un rival así, puedes perder igual igual sin estar nervioso».J.O.