Quienes no trabajan de cara al público en el hiper

Me ha ganado totalmente Thomas Stuber con su nuevo trabajo, por lo que toca recuperar sus realizaciones previas, que tampoco son muchas. Me recomiendan su reciente proyecto televisivo “Kruso” (2018), disponible en la plataforma Filmin. Desconozco su ópera prima “Angustia adolescente” (2008), y recuerdo con agrado “Herbert” (2015), que le valió el premio del cine alemán al Mejor Actor a Peter Kurt, con el que vuelve a repetir ahora, ya como secundario. Esta vez ese mismo premio se lo ha llevado el estelar Franz Rogowski, el único obtenido de un total de cuatro nominaciones, incluida la de Mejor Película. En la Seminci “In den gängen” (2018) se llevó la Espiga de Plata y el Sociograph Award. Seguramente se merecía todavía algo más.

“En los pasillos”, que es como se debería haber traducido el título original en alemán, es una pequeña joya. Está a la altura del cine del finlandés Aki Kaurismäki, por citar al maestro de estilo más influyente en una puesta en escena que se desarrolla en un espacio frío pero habitado por unos personajes que lo llenan de calor humano. Stuber crea un universo singular con sus propias leyes internas en el almacén de un hipermercado, donde trabajan quienes no están de cara al público. Su rutina diaria está perfectamente plasmada, mediante gestos y comportamientos que se expresan por sí mismos silenciosamente y no necesitan del subrayado de la palabra.

La relación entre el nuevo carretillero y la chica de dulces, con sus encuentros en el terreno neutral delimitado por la máquina de café, expresa un tipo de convivencia hecha de compañerismo laboral que pone a los operarios y las operarias a salvo de las miserias del exterior. Ella está casada y no es feliz en su matrimonio, pero la cercanía con ese chico tímido y enamoradizo crea un sano estímulo contra la desesperanza.