2019 URR. 11 ABOMINABLE La animación está intentando resucitar al Yeti Mikel INSAUSTI Aunque el reciente estreno de “Misión Katmandú” (2017) ha pasado un tanto desapercibido, lo cierto es que la muy recomendable película de Quebec se adelantó en su intento de resucitar el mito del Yeti en animación para público familiar. Lógicamente, “Abominable” (2019) goza de una repercusión mucho mayor en todo el mundo, al tratarse de una producción del estudio DreamWorks Animation en una coproducción entre Hollywood y China que ha costado 75 millones de dólares, y que es distribuida por Universal. Para su realización han juntado a la animadora Jill Culton, que también ha escrito el guion, y a su habitual colaborador Todd Wilderman. Ambos proceden de la franquicia “Colegas en el bosque”, ocupándose ella de la entrega del 2006 y él de la del 2008. El estilo visual de la película es muy reconocible, así como el diseño de la criatura, ese abominable Hombre de las Nieves, al que han rebautizado como Everest. En lo uno y en lo otro recuerdan poderosamente a la producción de la casa “Cómo entrenar a tu dragón” (2010), con sus sucesivas entregas. No cabe duda de que se ha dejado de lado un posible aspecto aterrador, con lo que la película se aparta por completo del género de la “monster movie”. Es una cinta de aventuras toleradas, con su mascota peluda al alcance de niños y niñas. La protagonista humana es una niña de Shanghai llamada Yi, una virtuosa del violín que se encuentra con Everest en la azotea de su edificio, después de que este haya huido de un laboratorio.