2020 MAR. 10 Un District Heating que dispara los precios de la calefacción El remozado barrio donostiarra de Txomin Enea cuenta con un sistema de calefacción y agua caliente que fue presentado en su día como sostenible y barato, pero EH Bildu ha revelado que los vecinos se están topando con facturas hasta un 55% más caras. Imanol INTZIARTE DONOSTIA Ricardo Burutaran y Markel Ormazabal, ediles de EH Bildu en Donostia, denunciaron ayer que las facturas de calefacción del sistema District Heating en el barrio de Txomin Enea «son, de media, un 55% más caras», si se comparan con el precio que pagan otras familias donostiarras que tienen gas natural en casa. El District Heating es un sistema comunitario de calefacción y agua caliente que utiliza biomasa como combustible, reduciendo las emisiones de CO2 respecto a otros sistemas convencionales. En su día, su puesta en marcha fue anunciada a bombo y platillo, dentro de un paquete de medidas que iban a hacer de Txomin Enea –ubicado a orillas del Urumea, entre Loiola y Martutene– el «barrio más inteligente de Euskadi». Burutaran y Ormazabal recordaron que el Gobierno municipal descartó la gestión pública de esta infraestructura y la adjudicó a la UTE conformada por Ferrovial y Tecnocontrol. La concesión es para un periodo de 15 años. El Ayuntamiento, a través de Fomento Donostia, es el titular del servicio y el que fija las condiciones y los precios de explotación, mientras que la adjudicataria es la encargada de producir y gestionar esa energía y de cobrar a los vecinos. Cuando se presentó este sistema, se aseguró que, entre otras ventajas, supondría un ahorro de alrededor del 10-15%. Pero a la hora de la verdad los residentes del bautizado como «ecobarrio» y «zona de desarrollo smart» se han topado con facturas mucho más altas. Los representantes de EH Bildu explicaron que han realizado simulaciones para comparar precios. «Las facturas de Txomin Enea son, de media, un 55% más caras. Nos consta que, por su parte, vecinos de Txomin Enea han realizado sus propios números y que han comparado la factura de Ferrovial con la factura de otras empresas suministradoras de energía, con similares resultados». La coalición soberanista ha interpelado al Gobierno municipal para que dé explicaciones por lo que considera «facturas abusivas». El enfado y las quejas van en aumento. Hace un mes, la Asociación de Vecinos ya denunció que 1,6 millones de euros que iban a ser destinados a la urbanización del barrio iban a ser usados para costear la obra de la escultora Cristina Iglesias en el faro de Santa Clara.