Los suplentes del Madrid ganan con la ayuda del VAR

Busquets Ferrer instó a Munuera Montero a anular el empate de Kubo nada más marcar Arda Güller en la primera ocasión generada por los de Ancelotti, que confirmaron su capacidad de resistir y competir.

La Real no pudo mejorar su mal balance de esta temporada en Anoeta, una victoria en los últimos once partidos oficiales, ante un Real Madrid que demostró que hasta sus jugadores suplentes tienen un gran nivel competitivo y la calidad para marcar un gol en la única oportunidad que generaron hasta el tiempo añadido.

Los blanquiazules aprovecharon el descanso que Ancelotti dio a sus mejores jugadores ofensivos para no conceder más ocasiones, dominar y generar las oportunidades suficientes para ganar el partido. Pero solo materializaron una de Kubo y el VAR la anuló por una falta que podía pitar Munuera Montero, pero que no era tan flagrante para que interviniera Busquets Ferrer para impedir el empate en un momento clave nada más marcar su tanto Arda Güller.

Imanol introdujo cuatro cambios con respecto a Getafe con la vuelta al once de Zubeldia, Zubimendi y Kubo y la elección de Odriozola en el lateral derecho para sustituir al lesionado Traoré, con Turrientes con el pivote y Merino en el centro a un buen nivel.

El Real Madrid alineó a los suplentes ante la cercanía de la ida de la semifinal de la Champions que va a jugar el martes contra el Bayern de Munich. Nacho y Carvajal fueron los únicos titulares del equipo que logró la clasificación en el campo del Mancester City. La Real lo aprovechó para ser superior en el primer tiempo, con dos centros peligrosos de Javi Galán y dos buenos remates de Kubo y Turrientes.

Pero al Real Madrid le bastó con su única jugada de ataque antes del descanso para adelantarse con un gol de Arda Güller en su primera titularidad en Liga al aprovechar un gran centro de Carvajal que no acertó a despejar Zubeldia y una mala posición de Odriozola.

JUGADA CLAVE

Kubo empató enseguida, pero Busquets Ferrer instó a Munuera Montero a anularlo por una falta de Barrenetxea a Tchouameni, que no era tan clara como para que interviniera el árbitro del VAR.

El segundo tiempo comenzó con otro buen disparo de Turrientes con el exterior que Kepa envió a saque de esquina, pero el Real Madrid controló y cortó mejor el juego. La Real solo inquietó después en un gol anulado por fuera de juego de Oyarzabal y en un remate con la derecha del capitán que salió fuera por poco.

Ancelotti introdujo a jugadores titulares en la última media hora de partido y eso le ayudó a controlar mejor el partido y se acercó con peligro en los minutos finales a ante una Real que no encontró una buena respuesta del banquillo.

Imanol no arriesgó con Brais y decidió acabar con André Silva junto a Oyarzabal, Becker, Kubo y Zakharyan, pero se volvió a comprobar que no por jugar con más delanteros se ataca mejor y más ante un Madrid que ya demostró ante el Manchester City que no tiene prejuicios con su calidad para ponerse el buzo de trabajo y defender en su área.