2025 AZA. 10 LIGA F La Real sobrevive al intercambio de golpes para mantenerse en el podio Lucía marcó pronto, pero el Espanyol empató poco antes del descanso. Los goles de Aiara y Cahynová sí bastaron, aunque el rival no desistió. Cahynová, asistente y goleadora, celebra con Lucía Rodríguez el tanto de la madrileña. (LIGA F) Amaia U. LASAGABASTER {{^data.noClicksRemaining}} Artikulu hau irakurtzeko erregistratu doan edo harpidetu Dagoeneko erregistratuta edo harpideduna? Saioa hasi ERREGISTRATU IRAKURTZEKO {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Klikik gabe gelditu zara Harpidetu {{/data.noClicksRemaining}} La Real vuelve a tomar velocidad para mantener la ilusión europea. El triunfo ante el Espanyol distó de ser perfecto porque las donostiarras encajaron dos goles, desaprovecharon la ventaja que les dio el tanto tempranero de Lucía Rodríguez y ni siquiera con dos de renta en el segundo tiempo pudieron acabar tranquilas. Pero fue un triunfo, a fin de cuentas, y se mantienen en el podio de la clasificación. Con Aiara de vuelta en el once y la primera titularidad de Lavogez, la Real entró enchufada. Un centro de Cahynová nada más empezar estuvo a punto de forzar el autogolazo de Júlia Guerra. Acabó en córner y la propia jugadora checa lo peinó en el primer palo para que Lucía Rodríguez rematara el 0-1 en el área pequeña. Era el minuto dos y todo se ponía a favor de las guipuzcoanas, que se sintieron muy cómodas aunque solo un cabezazo desviado de Edna y un remate alto de Cahynová les acercaron, es un decir, a la sentencia. NO ESTABA MUERTO Tocó lamentarlo porque el Espanyol parecía muerto, pero solo estaba dormido. Y despertó mediado el primer tiempo. Arrula y el larguero evitaron el gol de Naima en dos acciones consecutivas. Mayor fue el susto cuando la portera arrolló a Arana en el área, pero en la revisión se constató que Arrula no vio a su rival hasta que no se le había echado encima y la jugada quedó sin sanción. Arana se sacó la espina al filo del descanso con un chut desde la frontal ante el que Arrula pudo hace más y devolvió las tablas al marcador. Había cogido mala pinta el partido, pero la Real mejoró tras el descanso, ganando en intensidad y empezando a mover el balón con más sentido. Las ocasiones claras se hicieron desear, pero la sensación ya era otra. Aiara lo confirmó marcando el 1-2 con un disparo raso y cruzado desde la frontal del área. Se vino arriba su equipo. Andreia probó con un cañonazo que Salvador envió a córner y Cahynová acertó cabeceando una asistencia de Inza en el segundo palo para hacer el 1-3. Tampoco este fue definitivo porque el Espanyol quiso contestar y las realistas no supieron colocarle la mordaza. Ainoa remató un centro de Judit Pablos en el punto de penalti para apretar el marcador y el partido. El equipo donostiarra probó pero no acertó, pese a que Salvador disputó los últimos minutos lesionada, y tampoco lo consiguió su rival, pese a que tuvo dos buenas ocasiones en la recta final.