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FINAL DEL CUATRO Y MEDIO 2025

La experiencia de Peio Etxeberria hace decantarse a la cátedra por él

Las dos finales perdidas en contraposición con la condición de novato de Javier Zabala hacen al delantero de Zenotz poseedor de la confianza de los expertos, aunque se espera que el najerino vaya a dar el nivel y sin olvidar su triunfo en el Torneo San Fermín.

- (GARA)

 

La cátedra, desde la tertulia de NAIZ Irratia a los excampeones Jokin Altuna y Joseba Ezkurdia, está persuadida que la final del Cuatro y Medio 2025 se la va a llevar Peio Etxeberria. Por más que casi nadie espera que el de Zenotz vaya a vapulear a un Javi Zabala novato en estas lides, eso de que la experiencia es un grado deja de ser una frase hecha a la hora de lanzar el pronóstico de esta final en el acotado. Es verdad que la cátedra ha fallado con estrépito hace no mucho, cuando se pronosticaba una final entre Altuna y Ezkurdia, viéndose los dos jugadores desbordados sobre todo en el plano físico así por Etxeberria como por Zabala, pero ya que se hace la pregunta, bueno es disponer de una opinión.

En ese sentido, el hecho de que el delantero navarro se haya procurado sacudirse de todo favoritismo de cara a esta tarde quizá sea el elemento que mayores dudas suscita. Como una suerte de incertidumbre que despierta la mentalidad del delantero de Zenotz, no así su juego, pese a empezar el Campeonato del Cuatro y Medio cayendo por 22-18 ante Jaka y obligando al navarro a levantar un «match ball» tras otro. Así fueron cayendo sucesivamente Larrazabal, por 22-6, Ezkurdia -por 10-22, en un día en el que al de Arbizu le bastaba con hacer un tanto para pasar a semifinales- y el ya bien conocido 9-22 frente a Jokin Altuna.

«Después de haber perdido acabas dudando de ti mismo, pero me he sentido bien. Lo que importaba era llegar a 22 y así lo he logrado». Esas fueron las palabras de Peio Etxeberria tras vapulear a Larrazabal, en un partido en el que marcaría el devenir del navarro camino a esta su tercera final en la «jaula». Conquista del centro de la cancha, zurdazo va, zurdazo viene para mover a su rival y machacarlo sin darle opción.

Acostumbrado a jugar en el alambre, Etxeberria basa su juego a partir de un resto que solo ha dejado seis saques sin levantar -Zabala, el doble-, la mitad en su derrota frente a Jaka. Eso, junto con su conocida resistencia física, lo vuelven favorito. Incluso el hecho de que ya tiene una txapela en su palmarés, la del Parejas de 2024 conquistado junto a Zabaleta. Para aquellos que conjugan aquello de «para ganar finales primero hay que perderlas» y «a ganar se aprende ganando», Peio Etxeberria es su caballo ganador.

EL HOMBRE TRANQUILO

Pero hete acá que el rendimiento de Javi Zabala levanta muy pocas dudas. Su dominio escénico es proverbial y desde luego que tras el correctivo que se llevó en el Cuatro y Medio del año pasado ante Elordi, ha madurado de golpe. Y sin perder la sonrisa. Si acaso la final se alargase de más...

«He mejorado el resto y en jugar tantos sin venir a cuento ni ausentarme», declaraba el najerino en la elección de material. Y nadie le dijo que no, en vista de cómo sacó a Ezkurdia a pelotazos en semifinales.

Su viaje, con todo, no ha sido tan placentero. Empezó la liguilla ganando por 20-22 a Peña II y perdiendo por 21-22 frente a Bakaikoa, teniendo que jugársela frente a Altuna. Tuvo la suerte de cara el pelotari riojano de encontrarse con una lesión de Altuna en los abductores, algo que hizo que el de Amezketa renunciase a jugar el último partido de liguilla de cuartos de final y poder recuperar bien sus manos, siempre tan problemáticas. El resto, es historia.

Es aquí donde entra el factor de incertidumbre de la cátedra. «En las finales hay tensión y los fallos son garrafales. Por tanto, el que menos falle, gana», recuerda Unai Laso, vigente campeón del Cuatro y Medio. El de Bizkarreta-Gerendiain se suma en apostar por Etxeberria, pero advierte que «Javi -Zabala- también ha tenido momentos difíciles y los ha sabido gestionar».

Zabala puede ser el primer riojano en hacerse con la txapela de la «jaula» tras el logrado por Titín III en 2007 frente a Barriola. «La ilusión está ahí, pero no voy a volverme loco por ser el relevo», declaraba el najerino, a sabiendas de que unos 200 paisanos estarán presentes en el Bizkaia Arena.

Asimismo, en el Torneo de San Fermín Zabala se impuso por 13-22 a Peio Etxeberria. Y aunque la cátedra insiste en que no tiene nada que ver con esta final, el duelo del 4 de julio sigue siendo el único precedente entre ambos en el Cuatro y Medio. Y no lo ganó el favorito.