2025 AZA. 29 BDZ celebra que CAF pierda un contrato en Irlanda y critica su «victimismo» CAF ha perdido definitivamente el contrato de 650 millones de euros para renovar la línea ferroviaria entre Dublín y Belfast después de que el Tribunal Superior irlandés rechazara su recurso y autorizara la firma con la empresa suiza Stadler. Según BDZ, la decisión subraya el debilitamiento reputacional de la empresa en el ámbito internacional. Imagen de archivo de empresa CAF, en Beasain. (Gotzon ARANBURU | FOKU) GARA DUBLIN {{^data.noClicksRemaining}} Artikulu hau irakurtzeko erregistratu doan edo harpidetu Dagoeneko erregistratuta edo harpideduna? Saioa hasi ERREGISTRATU IRAKURTZEKO {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Klikik gabe gelditu zara Harpidetu {{/data.noClicksRemaining}} CAF no construirá los trenes que sustituirán a los que operan el servicio entre Dublín y Belfast. La empresa vasca impugnó la adjudicación del concurso de 650 millones de euros, otorgado finalmente a la compañía suiza Stadler, pero la Sala de lo Mercantil del Tribunal Superior de Irlanda ha rechazado su recurso. En su resolución, el tribunal advierte de que estimarlo obligaría a reiniciar todo el procedimiento y pondría en riesgo los 165 millones de euros de financiación europea vinculados al proyecto, y argumenta que el «elevado interés público» de asegurar la inversión pesa más que el perjuicio que pueda causar a CAF. En un comunicado, la plataforma BDZ interpretó el fallo como «un fracaso» del proceso iniciado por la empresa vasca, a la que acusó de haberse construido sobre «una tesis victimista» según la cual su exclusión obedecería a la presencia de CAF en el denominado Informe Albanese como compañía «cómplice de apartheid» por sus vínculos económicos con Israel. La sentencia, en cualquier caso, evita cualquier consideración política o ética y se centra exclusivamente en los aspectos contractuales y en la salvaguarda de la financiación europea. En las 34 páginas de la resolución, el juez Twomey no establece relación alguna entre la presencia de CAF en la lista de Naciones Unidas sobre empresas con actividad en asentamientos israelíes y el resultado del concurso, ni sugiere que ese factor haya influido en la adjudicación. Tampoco consta que, durante el procedimiento, se alegara que la no adjudicación a la empresa vasca estuviera vinculada a su inclusión en dicha lista. BDZ sostuvo que la decisión judicial deja a CAF sin la posibilidad de acceder a este contrato estratégico y limita su margen legal a reclamar una eventual compensación económica, además de exponerla al pago de costas. La plataforma interpretó así el fallo como un signo del deterioro reputacional de la empresa y de la pérdida de credibilidad de sus argumentos. De este modo, responsabilizó directamente a la dirección de CAF de haber arrastrado a la empresa a una posición «inmoral y colonialista» por su implicación en proyectos en Jerusalén, acusándola de desoír advertencias y de recurrir ahora a una estrategia de victimización para eludir responsabilidades. BDZ afirmó, además, que las instituciones vascas no pueden seguir ignorando lo que, asegura, señalan Naciones Unidas, Amnistía Internacional y numerosas organizaciones sociales, y reclamó mayor presión para que CAF abandone toda actividad vinculada al régimen israelí. En vísperas de un nuevo aniversario de la partición de Palestina, la plataforma llamó a mantener la movilización social y sostuvo que casos como el de Irlanda muestran que la complicidad empresarial con el apartheid es cada vez menos tolerada a nivel internacional. Según BDZ, Euskal Herria no debe quedar al margen de este cambio. RECURSOEl contrato se encontraba paralizado después de que CAF presentase un recurso para impugnar la elección tomada por las autoridades irlandesas Irish Rail y Northern Ireland Railways.