Putin estrecha lazos con Modi y le promete petróleo mientras Trump desprecia a Europa

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró en Nueva Delhi, donde se reunió consu homólogo indio, Narendra Modi, que su país está listo para mantener «envíos ininterrumpidos de combustible para la economía india», una promesa que busca disipar las dudas generadas por las sanciones occidentales sobre la flota petrolera de Moscú.

«Rusia es un proveedor confiable de petróleo, gas, carbón y de todo lo que se requiere para el desarrollo energético de India», afirmó Putin. India es el segundo mayor importador de petróleo ruso a nivel global, aunque la entrada en vigor de sanciones estadounidenses contra las petroleras rusas Rosneft y Lukoil pueden provocar una disminución del número de barriles rusos provistos a este país asiático.

Las refinerías indias han permitido que el crudo ruso encuentre una salida estable hacia los mercados internacionales, incluidos Europa y Oriente Medio. Según Putin, el volumen de negocio de petróleo y productos derivados rusos solo experimentó un ajuste menor en los primeros nueve meses de 2025, y el petróleo ruso «fluye sin problemas en India».

Además, informó de que Rusia está llevando a cabo un proyecto para poner en marcha la mayor planta de energía nuclear de India. Junto a estos planes energéticos, Putin y Modi trazaron una hoja de ruta para elevar el volumen de negocio bilateral de los actuales 64.000 millones de dólares a 100.000 millones, un intercambio en el que el 96% de los pagos ya se realizan en monedas nacionales, esquivando el sistema financiero basado en el dólar para evitar el impacto de las sanciones.

Los acuerdos firmados entre Rusia e India incluyen el uso de tecnología india en una gran fábrica farmacéutica en Rusia, además de colaboración en defensa, migración y seguridad alimentaria, entre otros.

«BORRADO DE LA CIVILIZACIÓN EUROPEA»

En el otro hemisferio, el Gobierno de Donald Trump arreció en su desprecio a Europa, al advertir del «borrado de la civilización» europea por sus políticas migratorias y la supuesta censura de la UE, en un informe de la estrategia de Seguridad Nacional de EEUU que propone ayudar a «corregir» el rumbo del continente. El documento, descrito por Trump como una hoja de ruta para garantizar la supremacía estadounidense, critica duramente a sus aliados europeos y asegura que si estas «tendencias actuales continúan, el continente será irreconocible en 20 años o menos», poniendo su esperanza en los movimientos de extrema derecha.