GARA Euskal Herriko egunkaria
LIGA ACB

Pese a luchar de tú a tú ante Valencia, una canasta final deja al Baskonia sin premio

Diakité empató a 89 a un segundo, suficiente para que Kameron Taylor anotase y truncase una racha de siete triunfos de los gasteiztarras en casa.

Kameron Taylor evitó la prórroga anotando sobre la bocina. (Aitor BOUZO | ACB PHOTO)

Parecía que iba a llegar la primera prórroga del Buesa Arena esta temporada, pero Kameron Taylor aguó la fiesta. Con el reloj arrojando sus últimos granos de arena, una canasta sobre la bocina dejaba a los gasteiztarras con cara de tontos, pese a haber tenido bajo control a un Valencia Basket que 48 horas antes lograba una impresionante victoria en la cancha del Panathinaikos.

«Hemos visto un espectáculo de baloncesto inmenso y hemos estado a gran nivel ante uno de los tres mejores equipos de Europa en la actualidad», subrayó Paolo Galbiati. «Han sido pequeños detalles los que han decidido la suerte del partido. Nuestra defensa final ha sido casi perfecta, pero el tiro más difícil del basket ha tenido que entrar», indicó el preparador lombardo, completando la confesión de Pedro Martínez, técnico taronja, pocos minutos antes.

«En la última jugada hemos preparado una cosa y ha salido otra. El Baskonia la ha defendido muy bien pero la calidad de Kam -Taylor- ha decidido. Al final, lo que cuenta es el factor humano», explicó, a su vez, el extécnico del Baskonia.

Después de un 2-12 adverso en el amanecer del duelo, el primer acto terminó con 17-20 para Valencia Basket, pero con la lesión de Badio en el bando taronja. Ese contratiempo más los nueve puntos de Markus Howard en el segundo acto, desperezaron a los de Paolo Galbiati, quienes voltearon el duelo, al punto de llegar al descanso ganando 44-39.

PÉRDIDAS Y REBOTES

«El Baskonia nos ha dominado durante muchos minutos, pero hemos podido sacar bastante provecho del rebote ofensivo», admitió Martínez. Lo cierto es que los valencianos agarraron 18 rebotes ofensivos, llegando a lanzar 33 tiros libres.

Ese detalle, un par de pérdidas tontas de Radzevicius y la entrada en calor de Jean Montero adelantó a los taronja pese a los 26 tantos de Luwawu-Cabarrot: 87-89. El alero francés asistió a Diakité para empatar a 89 cuando solo restaba un segundo y todo apuntaba a cinco minutos más de emoción. Pero Kameron Taylor, siempre frío, le dio una dolorosa puntilla al partido y al Baskonia, aunque todavía sigue octavo.