2025 ABEN. 14 DURO REVÉS A LOS ARRANTZALES Bruselas aprueba un duro recorte para la pesquería del verdel en 2026 Lakua convocará al sector pesquero para analizar el impacto económico de una reducción del 70-73% en la pesquería del verdel. Las cofradías demandan el cierre de este caladero junto a un «plan serio» de recuperación de la especie. Las cuotas bajan también para merluza, gallo, abadejo, lenguado y rape, mientras la anchoa alcanza el máximo permitido y el atún rojo sube un 17%. Piezas de verdel, listas para su preparación en el Berdel Eguna de Mutriku. (Gorka RUBIO | FOKU) GARA DONOSTIA {{^data.noClicksRemaining}} Artikulu hau irakurtzeko erregistratu doan edo harpidetu Dagoeneko erregistratuta edo harpideduna? Saioa hasi ERREGISTRATU IRAKURTZEKO {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Klikik gabe gelditu zara Harpidetu {{/data.noClicksRemaining}} El acuerdo político alcanzado la madrugada de ayer en Bruselas por el Consejo de Ministros de Pesca de la Unión Europea sobre las oportunidades de pesca para 2026 ha encendido las alarmas en la flota vasca, especialmente en el segmento especializado en el verdel. La reducción provisional de hasta un 73% en la cuota de esta especie para el primer semestre del próximo año llevó al Gobierno de Lakua a anunciar la convocatoria «inminente» de reuniones con el Ministerio, las cofradías y las organizaciones representativas del sector para estudiar medidas que permitan amortiguar las pérdidas. La consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, Amaia Barredo, que participó en el encuentro europeo como coordinadora de las comunidades autónomas, calificó el resultado como «especialmente duro» para el verdel, una pesquería de marcada estacionalidad y de gran peso económico para determinadas embarcaciones de bajura. A falta de un acuerdo definitivo entre los Estados ribereños del Atlántico nororiental, la UE fijó límites provisionales de captura para la primera mitad de 2026 conforme al asesoramiento científico, con una rebaja del 70% respecto a las cuotas actuales. Desde Lakua advirtieron de que el impacto del acuerdo será desigual. Junto al severo recorte del verdel, se confirmaron reducciones en otras especies que afectan a la flota vasca: la merluza (-4,8%), el gallo (-20%), el abadejo (-13%), el lenguado (entre el -1% y el -6%, según zonas) y el rape (entre el -1,3% y el -3%). «La valoración global es negativa en lo que respecta al verdel, porque compromete la viabilidad de un segmento concreto del sector», subrayó Barredo. La merluza se mantendrá con la misma cuota que este año (17.445 toneladas), lo que dará cierta estabilidad a los arrantzales. En cuanto al abadejo, el recorte ha sido menor del esperado. La rebaja en las capturas en esta especie (13%) será de menos de la mitad de lo propuesto, que era del 28%. Ante este escenario, el Ejecutivo autonómico plantea un abanico de posibles medidas de acompañamiento, entre ellas paradas temporales, ajustes en determinados artes de pesca o flexibilizaciones en la gestión pesquera, siempre en coordinación con el Estado y el propio sector. ASPECTOS POSITIVOS No obstante, el acuerdo europeo también deja algunos elementos que el Ejecutivo de Gasteiz califica de positivos. La cuota de anchoa alcanza las 33.000 toneladas, el máximo permitido por el plan de gestión, de las que el Estado español podrá capturar el 90% (29.700 toneladas), lo que supone un incremento cercano al 8%. Asimismo, la cuota de atún rojo aumenta un 17% y se mantiene la del bonito del Norte, consolidando, según Lakua, el papel de la flota vasca en estas pesquerías. El pacto aprobado por la UE se enmarca en los objetivos de sostenibilidad de la Política Pesquera Común y se aplica, por ahora, hasta junio de 2026, a la espera de nuevas negociaciones con países costeros como Noruega, Islandia, Reino Unido e Islas Feroe. Un horizonte incierto que obliga al sector pesquero vasco a prepararse para meses de ajustes y negociación, con el verdel como principal foco de preocupación. Estos cambios, que están lejos de ser definitivos, seguirán siendo objeto de discusión en los próximos meses. SITUACIÓN «MUY GRAVE» La secretaria general de la Federación de Cofradías de Pescadores de Gipuzkoa, Miren Garmendia, alertó de la, a su juicio, situación «muy grave» en la que se encuentra la biomasa de verdel, al tiempo que reclamó el cierre de este caladero junto a un «plan serio» de recuperación de la especie. Tras el resultado de la reunión de Bruselas, declaró que no están satisfechos porque demandan la clausura total de esta pesquería, «a la vista de los informes científicos y de que la biomasa está por debajo del límite». Según explicó Garmendia, la prohibición de pescar verdel hubiera evitado «que los países del norte, que llevan ya unos años sobrepescando esta especie, siguieran haciéndolo», así como adoptar medidas para que esta especie «se pueda recuperar» y apoyar «a la flota que más está sufriendo este descenso» que es la flota de anzuelo. «Pero el acuerdo que se adoptado no ha sido ese», lamentó la portavoz de los arrantzales, quien aclaró que la «reducción drástica» que finalmente se decidió en la cumbre se ha concretado «porque no puede ser de otra manera», pues desde hace unos años «el verdel no entra en el golfo de Bizkaia en los niveles de biomasa en los que solía hacerlo habitualmente». Respecto al resto de especies, precisó que la situación de la anchoa y el bonito «es buena», mientras que el atún ha visto aumentada su cuota, algo que ha considerado «una buena noticia». «En las especies que se están explotando de manera sostenible con un plan de gestión serio se están viendo los resultados positivos», concluyó. SOBREPESCASegún los arrantzales, la prohibición de pescar verdel hubiera evitado «que los países del norte, que llevan ya unos años sobrepescando esta especie, siguieran haciéndolo».