Scratch, la programación al alcance de los niños El gesto

La obligatoriedad de aportar herramientas y conocimientos al sector estudiantil resulta necesario si se tiene en cuenta que vivimos en una sociedad informatizada. En un mundo cada día más dependiente de la red y más globalizado, muchos expertos abogan por un modelo educativo que de mayor importancia a estas materias. En este sentido, existen diversas iniciativas que pretenden solventar esta problemática convirtiendo el aprendizaje de programación en un juego para niños. Una de las apuestas más recurridas en este campo tiene como objetivo crear un entorno de iniciación en el lenguaje de programación y está pensado para ser utilizado por aquellas personas adultas o de corta edad que no tienen conocimientos en esta materia. Su nombre es Scracht.

Aunque Scratch está diseñado especialmente para edades entre los 8 y 16 años, puede ser usado por personas de todas las edades, de hecho, ya son millones de personas las que están creando proyectos en Scratch en una amplia variedad de entornos, incluyendo hogares, escuelas, museos, bibliotecas y centros comunitarios.

Scratch es una herramienta creada para comenzar a utilizar un lenguaje de programación de una manera simple pero eficiente. Se utiliza la metáfora de «piezas encajables» para animar objetos que se encuentran en la pantalla, con un uso muy sencillo e intuitivo y se utiliza desde un «entorno de desarrollo» que muestra de un solo golpe de vista todos los elementos necesarios: escenario, objetos y elementos del lenguaje. Podemos tener tantos escenarios y objetos como deseemos, utilizando aquellos que ya están disponibles con la instalación estándar de la herramienta, o bien creando los nuestros.

Los elementos disponibles no son únicamente dibujos, sino también sonidos. Podemos utilizar los que vienen por defecto, añadir sonidos nuevos desde la web del proyecto, o incorporar nuestras propias grabaciones, bien a través de la grabadora incorporada en el entorno, bien a través de cualquier otra herramienta externa. Prácticamente todo se lleva a cabo arrastrando y soltando elementos con el ratón, y modificando con el teclado únicamente valores numéricos, textos.

Uno de los elementos más interesantes del Scratch radica en que además de dotar a los niños las herramientas necesarias para aprender un lenguaje de programación, les permite desarrollar de forma gratuita sus proyectos en formato de juego o una pequeña animación.