2014 EKA. 03 Abdicación en plena crisis española El talante de Felipe dura dos minutos El careo sobre la legitimidad de la monarquía con una vecina de Iruñerria en junio de 2011, zanjado con un abrupto «ya has tenido tu minuto de gloria», reveló más sobre la personalidad de Felipe de Borbón que toda su actividad oficial. Ramon SOLA Las salidas de tono de Juan Carlos de Borbón han sido constantes, tanto en Euskal Herria -dedo corazón al aire- como en Madrid -se quejó a los periodistas de maltratarle- o en Latinoamérica -donde instó a callarse a Chávez-. Por contra, su sucesor ha sido presentado oficialmente como ejemplo de saber estar y talante, pero este rifirrafe a pie de calle en Iruñea le retrató. Fueron apenas dos minutos: Felipe de BORBÓN: Como tú sabrás, desde luego no me corresponde a mí convocar un referéndum, y yo soy el principal... Laura PÉREZ RUANO: Bueno, pero lo puede proponer o abdicar. Debería preguntar entonces a la ciudadanía. F.B: Yo creo en el sistema. L.P.R: Yo también, por eso mismo creo que es interesante en una democracia... F.B: Por mecanismos democráticos todo es posible... L.P.R: Hoy por hoy el referéndum sobre una monarquía o una república es inviable. F.B: Está previsto como un mecanismo posible. L.P.R: Un mecanismo que usted conoce y es bastante inviable (...) F.B: Yo voy a cumplir con mi deber, que he aprendido a hacerlo lo mejor posible y cumplo con la Constitución. L.P.R: La Constitución debería ser un derecho de toda la ciudadanía. Jefferson ya decía que el poder constituyente de hoy no puede condicionar el poder constituyente de mañana. Sencillamente quiero dejar de ser súbdita para ser ciudadana (...) F.B: Desde luego has conseguido tu minuto de gloria. L.P:R: Pues no era eso lo que quería. F.B: Pues lo has conseguido, porque esto no lleva a ningún lado.