Esta vez no pudo ser. Garbiñe Muguruza tuvo que decir adiós al torneo individual de Roland Garros al caer derrotada en cuartos de final ante la rusa Maria Sharapova por 1-6, 7-5 y 6-1. Eso no quiere decir que la vasco-venezolana se despide de París, ya que aún le queda el dobles para luchar por un trofeo.

Muguruza, de 20 años y número 35 del mundo, llegaba a la cita ante la siberiana después de haber apeado en el camino a nada menos que Serena Williams, la reina de la WTA, quien incluso afirmó que la tenista vasco-venezolana podría ganar el torneo.

Y no le fue mal el inicio del partido ante Sharapova, de 27 años, campeona en 2012 y finalista en 2013. Muguruza ganó de manera contundente el primer set (6-1) y estuvo a un solo juego de lograr el billete para semifinales. De hecho, la rusa comentó tras el partido que «Garbiñe empezó muy bien y hubo muy poco que pudiera hacer en el primer set». Y es que, a pesar de jugar vendada en el muslo izquierdo, la jugadora de madre venezolana y padre eibartarra arrancó el duelo rompiéndole el saque dos veces seguidas (4-0).

Sin embargo, en el inicio del segundo set se invirtieron los papeles y la rusa le arrebató el saque a la tenista nacida en Caracas (1-3). Muguruza recuperó el terreno perdido salvando dos bolas de rotura y haciéndole perder la concentración a su rival, que entregó su saque con dos dobles faltas seguidas.

Muguruza, a base de golpes planos, logró defender su servicio en el siguiente juego y desesperar a Sharapova, pero terminó concediendo el set (7-5), el primero que perdía en todo el torneo. En la última manga, la joven tenista se fue desinflando ante la experiencia de Maria Sharapova, desperdició 5 bolas de rotura cuando perdía 1-3 y fue dejando escapar sus opciones hasta que la rusa colocó el definitivo 6-1 en el marcador.

«Tiene mucho potencial»

«Ha sido un gran partido. Tiene mucho potencial, con el nivel que ha jugado este torneo. El éxito no llega en un día, es un gran proceso, pero está jugando mucho mejor que el año pasado», explicó Sharapova sobre Muguruza al término del duelo.

«La joven generación tiene ambición», acertó a decir Sharapova, la gran favorita para alzarse con el trofeo francés de 2014.

Por su parte, Muguruza indicó que «es duro, pero en el fondo estoy contenta (...) porque he visto que a las buenas de verdad les planto cara». Y resumió así el partido: «El primer set salí con la mentalidad de `voy a saco, pase lo que pase'. Ella salió muy nerviosa. Luego empezó a jugar mejor y mejor, al final se igualó y, por pequeños detalles, se decidió la segunda manga».

En la tercera y definitiva, la rusa elevó el nivel de forma que parecía que «estaba en la autopista», resumió la tenista con residencia en Barcelona.

«Ahora tengo confianza, creo en mí misma. Estos partidos te dan mucha experiencia y es bueno para mí ver que tengo el nivel. Necesito más experiencia en este tipo de partidos», dijo antes de centrarse en el doble: «Ahora, a concentrarnos `a full' en el doble, a ver si conseguimos pasar de cuartos».

En el otro encuentro de la jornada, la prometedora quebequensa Eugenie Bouchard eliminó a la española Carla Suárez por 7-6(4), 2-6 y 7-5 en 2 horas y 22 minutos y su próxima rival será la propia Maria Sharapova.

La española dejó escapar un partido en el que tuvo opciones de ganar todos los sets. Tuvo 5-2 y servicio en el primero, cuando desperdició incluso una bola para anotárselo. Ganó el segundo y en el tercero fue dominando 4-1, pero no aprovechó las oportunidades y cayó derrotada ante una tenista de 20 años y con una larga carrera por delante, más propicia a las superficies duras pero que ha demostrado una gran capacidad de adaptación también a la tierra batida.

«Creo que nunca había jugado un partido tan difícil como este. Carla es una gran rival, en tierra, pero yo he jugado muy bien el final del tercer set», dijo la jugadora de Quebec desde la pista.

A pesar de las derrotas, Muguruza y Suárez seguirán disputando el cuadro de dobles, donde buscarán la semifinal contra la checa Kveta Peschke y la eslovena Katarina Srebotnik.

Cuadro masculino

Ernests Gulbis, número 28 del mundo, sigue en estado de gracia, y ayer eliminó al checo Tomas Berdych, sexto de la ATP, por 6-3, 6-2 y 6-4. El tenista letón ya había vencido en octavos al suizo Roger Federer. Por su parte, el serbio Novak Djokovic tampoco tuvo problemas para deshacerse de Milos Raonic, al que venció por 7-5, 7-6 y 6-4.