2014 AZA. 16 Bilbao Basket En cuadro para recibir la visita del CAI Zaragoza Axel Hervelle se cae y llega Bertans para este mediodía Aparte de esta ausencia, Dejan Todorovic, Wragge y Mumbrú también están tocados. En el cuadro aragonés debutará el ala-pívot neozelandés Isaac Fotu. A. G. BILBAO BASKET-CAI ZARAGOZA Un buen arranque de Liga sirve de colchón para cuando lleguen las dificultades. Por ejemplo, dificultades físicas. Bilbao Basket se encuentra en cuadro, o casi, mientras vela armas para el partido que lo enfrenta al CAI Zaragoza en Miribilla, un rival con el que competir por jugar la Copa y asentarse en la zona noble. Axel Hervelle será baja para este mediodía, a lo que hay que añadirle las molestias de Mumbrú, Dejan Todorovic o Ethan Wragge. Por fortuna, Dairis Bertans sí podrá saltar a la cancha. El «cohete letón» y el ala-pívot belga sufren una misma lesión: rotura miofascial de la porción larga del bíceps femoral de su pierna derecha, aunque el escolta pudo recuperarse a tiempo. Por otro lado, Mumbrú continúa jugando a pesar de sufrir una rotura parcial de la fascia plantar de su pie izquierdo, Wragge sigue lejos de su mejor momento de forma, mientras que Dejan Todorovic padece un pequeño edema óseo en la cabeza del tercer metatarsiano del pie izquierdo. En todo caso, se espera que todos ellos se enfrenten a un CAI Zaragoza en el que son duda hasta última hora Jelovac y Katic, y en el que debutará el ala-pívot neozelandés -y pasaporte británico- Isaac Fotu. «Estas cosas pasan en las plantillas. Lo importante es que los que estén para jugar, estén preparados. Ahora mismo la preocupación máxima son los jugadores que están en plantilla», recalcaba Sito Alonso. Más «Efecto Miribilla» que nunca No obstante, frente a los múltiples problemas físicos que padece su equipo, el preparador de Monzón sí que precisó la importancia del apoyo de Miribilla. «Son dos bajas importantes», reconocía Sito Alonso, «porque Dairis y Axel cumplen una función máxima en el equipo, sobre todo en nuestro concepto de identidad», añadía. «Pero por otro lado, contamos con algo que no cuenta nadie; la gente de Miribilla es uno de los marcos diferenciales respecto al resto. Eso, obviamente no es baja; es alta y da un plus diferente a lo que te puedes encontrar en cualquier otro campo», apostillaba el preparador bilbaino.