2014 AZA. 17 Baloncesto Bilbao Basket sufre ante el CAI Zaragoza su primera derrota de la temporada en casa Lisch y Goulding recuerdan que no siempre se remonta Bilbao Basket estuvo cerca de voltear un 11-26 adverso, pero el CAI siempre encontró una respuesta. Arnaitz GORRITI BILBAO BASKET 71 CAI ZARAGOZA 82 Si el triple de Colom con 69-70 hubiera entrado, quizá dijéramos que Bilbao Basket volvía a remontar tras un mal inicio. Pero ese tiro no entró -Colom firmó un 0 de 12 en tiros de campo, y el equipo un 11 de 40 en triples- y Bilbao Basket, pese a no rendirse, tuvo que doblar la rodilla. Además, los maños Lisch y Goulding supieron anotar cuando parecía que los hombres de negro podían ganar. Si el primer cuarto de Manresa fue malo, el de ayer fue peor. Firmando un 4 de 18 en tiros de campo -0 de 8 en triples-, Bilbao Basket tuvo que hacer frente a un CAI en el que Pere Tomàs -11 tantos- comenzaba desatado y que se escapó por 11-26. La diferencia de valoración era todavía mayor: -1 a 36. Los locales animaron Miribilla con dos canastas de Gabriel -infrautilizado por Sito Alonso, ya que el CAI jugó con un alero móvil como Landry de ala-pívot- y otras dos de Raül López, junto con una mayor dureza defensiva. El segundo triple del de Vic puso la desventaja por debajo de la decena y Mumbrú cerraba un parcial de 12-2 con otro tiro lejano: 23-28, tras firmar un portentoso 4 de 6 en triples. Pero el CAI, pese a la tercera falta de Norel, no se iba a quedar mirando. Kevin Lisch empezaba su festival encadenando dos triples inverosímiles para elevar el 25-34, amén de ponerse a la altura defensiva requerida. Bertans y Mumbrú daban otro arreón hasta poner el 33-37 en un ambiente tenso con un mal trío arbitral. Al descanso, el CAI Zaragoza ganaba por 36-41. Sin culminar la remontada Los de Sito Alonso saltaron más enchufados en el tercer cuarto. Los hombres de negro comenzaban su acoso a un CAI Zaragoza que se defendía con los triples de Lisch, en unos minutos en los que Marko Todorovic fue el mejor de los bilbainos, cargando de faltas a Katic y Norel, y situando a su equipo 50-51. Empero, el buen número de tiros libres errados impidió que los hombres de negro culminaran la remontada, algo clave a la postre. Mientras, Goulding tomaba el relevo anotador visitante y le daba aire a los maños, amén de sacarle la cuarta falta personal a Marko Todorovic. El último período empezaba 52-56. El CAI Zaragoza volvía a abrir brecha con un parcial de 3-7 cerrado con un gancho de Norel. Con dos bases en cancha -Colom compensó con rebotes y asistencias su horrible día en el tiro-, Bilbao Basket reaccionó con sendos triples de Bertans y Mumbrú, respondidos por Norel y un acrobático «dos más uno» de Goulding: 61-68. Raül López, de nuevo de tres, hacía creer a los locales y al CAI le entraban los nervios, aunque Llompart elevara el 64-70. Entre Williams y Mumbrú el marcador se ponía 69-70, y era el técnico maño quien pedía tiempo. Al palmeo de Katic, Williams le replicó con mate, pero al enésimo error de Colom le seguían una canasta de Goulding y dos tiros libres de Llompart; 71-76, falta en ataque de Williams y dos puntos de tiros libres de Lisch. No siempre se remonta. Aprender a jugar cuando no hay acierto «El acierto depende de muchos factores», suele decir Sito Alonso. Ayer lo repitió, pero matizó que «debemos aprender a jugar cuando no tenemos acierto». «Tras un inicio malo, nos hemos recuperado pese a no estar acertados y ante un buen planteamiento rival de dejarnos tirar. Debemos aprender a jugar cuando no estamos acertados, y sobre todo en los finales de posesión, cuando hemos ido un punto o dos abajo y nos han metido canastas importantes, porque no hemos estado finos, por errores de cambios defensivos», explicaba. «Estoy superorgulloso de la capacidad de reacción de mi equipo, por cada vez que ellos se iban. Es muy importante para generar una coraza y combatir todo tipo de problemas en los partidos», añadía. Reconoció que los 40 triples lanzados por su equipo fueron «demasiados», pero recordó que el planteo rival los invitaba a ello, y que «33 de ellos han sido solos y 28, por nuestros mejores tiradores». «Felicito a Colom por saber tomar la responsabilidad pese a su desacierto. Demuestra su confianza y la mía en él», remachó el de Monzón. A. G.