Los Gobiernos italiano, español, alemán, francés, británico, australiano y canadiense han expulsado a los respectivos embajadores de Siria por la masacre de Hula, ciudad situada en la provincia de Homs (oeste), después de haber acusado al Gobierno de Bashar Al-Assad de la muerte de al menos 116 personas, entre ellas decenas de niños.
En una acción coordinada, los citados ejecutivos han elegido este día para anunciar la salida de las legaciones sirias, según recoge TeleSur. Damasco niega haber perpetrado la matanza.
Gran Bretaña ha anunciado la expulsión del encargado de negocios sirio en Londres, el más alto representante diplomático del Gobierno de Siria que quedaba en el país, en protesta por la matanza.
Por su parte, el Gobierno francés ha anunciado que su decisión será notificada a la embajadora "hoy o mañana", ha declarado el presidente, François Hollande.
Hollande ha informado de que el llamado grupo de países "amigos de Siria" se reunirá "a principios de julio" próximo en París para discutir la situación de la nación árabe.
El Ministerio español de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha remarcado que la expulsión del embajador sirio en Madrid, Hussam Edin Aalafue, ha sido una medida adoptada de forma coordinada con otros países europeos.
EEUU retira al delegado
El Departamento de Estado de EEUU ha informado de su decisión de retirar a su delegado de para asuntos sirios, mientras Israel ha invitado a más países a sumarse a la iniciativa.
El Consejo de Seguridad de la ONU han condenado «en los más firmes términos la muerte confirmada por los observadores de la ONU de decenas de hombres, mujeres y niños y las heridas de centenares de personas en el poblado de Hula», y han responsabilizado al Gobierno de Al-Assad por usar artillería y tanques en esos barrios residenciales, a la hora de enfrentar a los rebeldes.
Sin embargo, el Gobierno sirio rechaza la condena porque la mayoría de las personas que han fallecido han muerto a quemarropa y no por la acción de las Fuerzas Armadas.
El mediador de la ONU y de la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, se encuentra en el país árabe para tratar de salvar su plan de paz. Entre otros, se ha reunido con el Gobierno de Al-Assad, quien le ha transmitido que el éxito o el fracaso de ese plan está supeditado al final del «terrorismo».
El presidente del Consejo de Coordinación Nacional Sirio (CCNS), principal grupo de la oposición interna en ese país, Hasan Abdelazim, ha instado a Annan a que presione a Damasco para que detenga la violencia.

Azken sanferminetako txupinazoan izandako errepresioa salatu dute zenbait eragilek

El Patronato del Guggenheim abandona finalmente el proyecto de Urdaibai

Ocho de los Filton24 mantienen la huelga de hambre como protesta por el genocidio en Palestina

Llaman a celebrar el 7 de febrero en Gernika la victoria popular frente al Guggenheim Urdaibai

