Alonso ha hecho público un comunicado en el que se refiere a un supuesto expediente sancionador elaborado por Prieto contra cuatro miembros del sector que encabeza, y que tanto la Comisión Ejecutiva del PSE como el propio secretario general de esa formación en Araba han asegurado que no existe.

En declaraciones a Efe, Prieto ha subrayado que «no ha existido en ningún momento ningún expediente» y ha confiado en que el PSE «pueda ser noticia por sus ideas, por su proyectos y no por supuestos problemas internos que le quieren convertir en una especie de enredo del que aparentemente no sabe salir».

Ha advertido de que el hecho de que se hable de expedientes que, según ha insistido, no existen, «hace un daño gratuito e innecesario al proyecto político» del PSE. Posteriormente, el propio PSE ha negado la existencia de expediente alguno.

Por su parte, en su comunicado, Alonso ha criticado que nadie de la dirección del partido se haya puesto en contacto con ellos para comunicarles que se iba a iniciar un expediente «contra personas que discrepan del rumbo de la organización».

A su juicio, «este tipo de amenazas no son sino un intento de levantar muros ante la pluralidad y la diferencia de planteamientos que existen» en el PSE, y que denotan, además, «que quien está al frente de la organización hoy ni entiende su filosofía, ni conoce su historia».

«Negar la evidencia»

«Intentar amedrentar o acallar a las voces renovadoras, críticas o plurales es negar la evidencia y tapar los oídos frente a la demanda social de un partido más abierto, transparente y participativo tanto en sus procesos internos como con la sociedad», añade Alonso.

El concejal de Gasteiz afirma que a pocas semanas de que se celebren congresos del PSE en la CAV y Araba «haber buscado expedientar a quienes plantean la necesidad de cambios supone un completo despropósito» y además, supone un intento de «prescindir de la mitad de la militancia».

Alonso ha rechazado la autocomplacencia en el análisis de los resultados electorales del pasado día 21 y entiende que el hecho de que el candidato a la reelección como lehendakari, Patxi López, encabezara la lista de Araba –de la que quedó fuera prácticamente en su totalidad el llamado sector renovador– «amortiguó el golpe» que habría sufrido el PSE de no haber sido el candidato.

Asume la responsabilidad del resultado electoral como un «fracaso compartido de todo el partido» porque perder el 36% del electorado en Araba es un mal resultado y no reconocerlo así aleja al PSE de la sociedad.

Por ello, reclama una lectura de los resultados electorales «sin vendas» y escuchando a la militancia, a los votantes del PSE de Araba y a la sociedad alavesa en cu conjunto, para lograr un partido «más abierto, más plural y más democrático».