En la iniciativa que se divulga a través de las redes sociales, sus promotores se hacen eco de la información publicada el pasado domingo por el diario ‘El País’, en la que se desvela que el antiguo militante de Fuerza Nueva Emilio Hellín Moro formó a miembros de las FSE «en técnicas forenses de espionaje y rastreo informático».

«Toda persona tiene derecho a la inserción social una vez cumplida una condena, pero las administraciones públicas no deben asignar determinadas tareas especialmente sensibles a quienes tengan antecedentes de una actitud criminal vinculada con las funciones asignadas», argumentan. De ahí que los allegados de la militante del PST víctima de la guerra sucia estimen que hay «una grave responsabilidad de los responsables directos o políticos en las contrataciones que desde hace varios años vienen haciéndose a Emilio/Luis Enrique Hellín Moro».

«Grave daño moral»

Estos hechos, advierten, han causado «grave daño moral» a los familiares, amigos y compañeros de la joven deustuarra. En su carta abierta, animan a la ciudadanía, a la sociedad civil, a que apoyen la misiva dirigida al titular de Interior pero también al ministro de Defensa.

Además, apostillan que sus actuaciones no se van a quedar ahí, ya que estudian otras iniciativas, así como interpelaciones en distintos foros parlamentarios. «Esta iniciativa no tiene solo que ver con el pasado, sino que, muy por el contrario, afecta al presente y al futuro», manifiestan.