La muerte de Maysara Abu Hamdiyeh, condenado a cadena perpetua en 2002 y enfermo de cáncer, en prisión ha acarreado fuertes enfrentamientos entre palestinos y fuerzas de seguridad israelíes que han dejado un saldo de al menos doce palestinos hospitalizados.

En los enfrentamientos, las fuerzas israelíes han disparado pelotas de goma y gases lacrimógenos en respuesta al lanzamiento de piedras contra una base militar, según ha informado la Media Luna Roja a la agencia palestina de noticias Maan.

Abu Hamdiyeh falleció a primera hora del martes tras semanas de protestas para exigir su liberación debido a su precario estado de salud, horas después de que la Autoridad Palestina afirmara que Israel le excarcelaría en los próximos días.

Tanto Hamas como Al Fatah han convocado movilizaciones para denunciar la muerte de Abu Hamdiyeh.

«Es un crimen brutal contra Maysara, particularmente teniendo en cuenta que la administración penitenciaria sabía que sufría un cáncer y sin embargo no le liberaron», ha denunciado el ministro para los Asuntos de los Prisioneros de la Autoridad Palestina, Issa Qaraqe.

El ministro ha asegurado que no se le proporcionó ningún tipo de tratamiento durante años, por lo que ha responsabilizado a Israel de su muerte. «Ha habido negligencia», ha dicho, al tiempo que ha pedido una comisión internacional para investigar lo ocurrido.

También el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha responsabilizado a Israel de la muerte de Abu Hamdiyeh. «La negativa de Israel a escuchar nuestras peticiones para la liberación de Abu Hamdiyeh han provocado un deterioro de su estado», ha declarado durante su intervención ante el Comité Central de Al Fatah.

El propio Abu Hamdiyeh informó a su abogado en marzo de que solo recibía analgésicos para tratar su enfermedad, que no recibía atención médica dentro de la cárcel y que sólo era atendido con medios sanitarios cuando era trasladado al Centro Médico Soroka de Beer Sheva.

Cada traslado al hospital era «otro viaje de sufrimientos», relató el preso en una reunión con su abogado. Durante la visita, Abu Hamdiyeh «apenas podía mantener erguida la cabeza», según el letrado. Los presos palestinos de las cárceles israelíes de Eshel y Nafha habían iniciado una huelga de hambre para demandar la liberación de Abu Hamdiyeh.

Israel, por su parte, diagnosticó oficialmente el cáncer a Abu Hamdiyeh en febrero y sostiene que estaba recibiendo atención médica. Tras un informe de la semana en el que se determinaba que su estado era terminal, el Servicio Penitenciario de Israel inició el proceso de excarcelación solicitado por el preso.