Rutte ha señalado que hay «incertidumbres» sobre el suceso y ha considerado que aparentemente el avión que viajaba de Amsterdam a Kuala Lumpur fue derribado. «Hay algo que está claro: si es un ataque, los autores tienen que ser encontrados y castigados. Es más, no descansaremos. Las víctimas y sus familias tienen derecho a ello», ha declarado.
El Gobierno holandés quiere una investigación completa e independiente que determine lo ocurrido y pleno acceso a todo el proceso, según su ministro de Exteriores, Frans Timmermans, que esta noche ha llegado a Kiev junto a un equipo de quince investigadores forenses que van a participar en la investigación del incidente.
El primer ministro holandés se ha mostrado prudente sobre la posibilidad de «apuntar con el dedo» hacia Rusia como ya han hecho otros países como Estados Unidos o Australia, y ha preferido aguardar a «los datos van a salir a la luz durante la investigación que se va a realizar».