Joseba VIVANCO

Heavy metal en la plaza de Leitza

Era el día... Sí, el de Oinatz, era sí o sí, y salió sí. Era el día de Pablo Berasaluze, era sí o sí, y salió no. Y mientras tanto, un riojano andaba suelto en el Frontón Bizkaia. Una final con poca historia, la justa, hasta que el de Berriz se sentó. Sin aire. Superado por la presión. Y a partir de ahí solo sonó el heavy metal... de Leitza.