
Casualidades de la vida, el expresidente de Uruguay José Alberto Mujica Cordano cumplió 80 años el pasado 20 de mayo en Euskal Herria. Era la primera vez que cogía vacaciones desde que salió de la cárcel en 1985. Y las dedicaba, junto a su compañera Lucía Topolansky, a viajar a Europa, al encuentro con las raíces de sus antepasados, emigrantes a «las Américas» a mediados del siglo XIX.
Como en todos los lugares que visita, «Pepe» Mujica despertaba el interés y la admiración también en las calles y pueblos vascos. Sus discursos humanistas y cargados de realismo ante instituciones internacionales, su humilde modo de vida en Montevideo, sus reflexiones sobre los nuevos retos de la humanidad y el carisma de su expresión cadenciosa han cautivado a millones de personas más allá de las filas de la izquierda y los grupos transformadores de todo el planeta.
Sin embargo, no todos conocen la abrumadora biografía de aquel joven agricultor inquieto y guerrillero que se lanzó a cambiar el mundo y que hoy, con 80 años, lo sigue haciendo. Con la finalidad de dar a conocer mejor su vida y pensamiento, GARA pondrá a la venta el próximo fin de semana el libro titulado “Mujica”, del escritor uruguayo Miguel Ángel Campodónico.
Edición 27 y Arnaldo Otegi
La editorial Astero, habitual de las promociones de este diario, ha adquirido los derechos para Euskal Herria de la obra publicada originalmente por la editorial uruguaya Fin de Siglo en el año 1999, cuando Mujica era diputado (el primer exguerrillero tupamaro que accedía al acta) y a 10 años de alcanzar la presidencia del país. Sin embargo, la calidad y el interés del trabajo no han dejado de generar nuevas ediciones hasta la actual, la número 27 (seguidora de otra en Corea del Sur), actualizada expresamente para el público vasco con una amplia introducción del editor uruguayo Edmundo Canalda y un anexo detallado de la actividad del Frente Amplio en su gestión de gobierno que ayuda a comprender la última etapa en la vida del expresidente de la República Oriental del Uruguay.
José Mujica es, además, una de las 24 personalidades internacionales que han firmado el manifiesto “Libertad para Arnaldo Otegi; presos vascos a casa”. Esa razón y cercanía hacen todavía más relevante que sea el propio Otegi el autor del prólogo de la presente edición. Para el líder independentista vasco, Mujica «es el ejemplo de quien nos enseña a vivir siendo coherentes» y «el clamor de una parte de la humanidad que exige una soberanía mundial al servicio de las grandes y oprimidas mayorías populares».
La presente edición incluye además un anexo fotográfico con imágenes de la vida de Mujica y páginas de prensa de la época.
Agricultor y guerrillero
José Mujica nació en 1935 en Montevideo. Con apenas 20 años se inició en la política para acabar fundando años más tarde la Unión Popular, junto al Partido Socialista de Uruguay. Mujica no ha negado nunca sus orígenes ideológicos libertarios, de amplia tradición en el país, pero la reflexión y la práctica política le encaminaron hacia el marxismo y una cierta heterodoxia que le ha acompañado durante toda la vida.
En la década de los 60 se incorporó al Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, que practicaba la guerrilla urbana, como miembro legal para pasar, tras un incidente fortuito, a la clandestinidad. Dirigió uno de los comandos en la audaz toma de la ciudad de Pando por una columna de tupamaros.
Durante su segunda detención, en 1970, fue tiroteado, incluso en el suelo, y a consecuencia de ello hubieron de extirparle el bazo. Huyó en dos ocasiones de la prisión de Puerto Carretas, y, en su actividad clandestina, José Mujica llegó a pasar más de dos días escondido en las cloacas de Montevideo mientras le perseguían policías y militares.
Detenido por cuarta vez en 1972, pasó a ser uno de los rehenes de la dictadura civico-militar, soportando condiciones de reclusión extremas. En 1985 quedó en libertad al concluir la dictadura. En su actividad legal fundó el Movimiento por la Participación Popular, que se integró en el Frente Amplio en 1989. En 1995 fue elegido diputado y en 2000 senador.
Con la llegada en 2005 del Frente Amplio al gobierno del país, Mujica ocupó el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Tras ganar las primarias del Frente, en 2010 venció en las generales y asumió la presidencia de Uruguay tras prestar juramento ante la senadora más votada del país, Lucía Topolansky, su compañera hace más de cuatro décadas. Se habían conocido en la clandestinidad y fueron apresados juntos en los años de la lucha armada.

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