Beñat ZALDUA

Ni abuelas andaluzas ni extrarradio, ahora es cinturón morado

EN SU PRIMERA INTERVENCIÓN EN LA CAMPAñA, PABLO IGLESIAS ENCENDIÓ LOS ÁNIMOS APELANDO AL ORIGEN DE LA GENTE PARA PEDIR EL VOTO. EL SEGUNDO DÍA NO LO MEJORÓ HACIENDO REFERENCIA AL EXTRARRADIO. AYER EMPEZÓ A AFINAR HABLANDO DE «CINTURÓN MORADO».

«Calma pueblo, aquí estoy yo». Los mítines de Catalunya Sí que es Pot (CSQP) en los que participa el líder de Podemos, Pablo Iglesias, arrancan con esta canción de ‘Calle 13’. Toda una declaración de intenciones. Iglesias es una estrella de rock y sus seguidores unos ‘groupies’, por lo que sus mítines se parecen más a un concierto. Pero quien quiera debatir sobre política que se aleje de una campaña electoral.

La secuencia se viene repitiendo a lo largo de la última semana, en la que Iglesias ha pasado más horas en Catalunya que en Madrid o Bruselas. La explicación es sencilla: su candidato para el 27S, Lluís Rabell, es completamente desconocido, y sus siglas, CSQP, se parecen más al nombre de un robot de ‘Star Wars’ que a una coalición electoral. Resumen: Iglesias se juega el 27S un buen punto de partida para la carrera hacia la Moncloa, por lo que ha decidido poner toda la carne en el asador y dejar claro que votar a Rabell significa votarle a él y votar a CSQP significa votar Podemos. El resto, incluidos Rabell y el líder de ICV, Joan Herrera (ayer telonero en el mitin de Mollet), son poco más que actores secundarios.

Los patinazos de los últimos días han sido antológicos. Difícilmente se olvidarán los exabruptos identitarios o las referencias al extrarradio. Pero alguien le ha avisado, y ayer en Mollet empezó a rectificar y a afinar el mensaje, utilizando para ello un concepto acuñado por el periodista Arturo Puente, colaborador de GARA. Ya no se trata de extrarradio, sino de «cinturón morado», color con el que espera teñir el otrora cinturón rojo de Barcelona.

No fue la única variación observada ayer. Iglesias se olvidó de la CUP y dirigió el 90% de los dardos a Artur Mas. No existen el independentismo, ni ERC ni Junts pel Sí en su vocabulario. Solo Mas. El 9% de los dardos fueron para Rivera (Ciutadans), con el que se disputa ese exvotante del PSC (está por ver si el cinturón será morado o será naranja). El 1% restante, anecdótico, para el líder del PSOE, Pedro Sánchez. No es extraño, al fin y al cabo, conviene recordar que para Iglesias, Sánchez y Rivera, el 27S no es sino la palanca para las generales de diciembre.