«Nosotros no tenemos ninguna duda de que la ciudadanía nos elegirá para que estemos aquí, no tenemos ninguna duda de que la ciudadanía nos votará. Y, en consecuencia, nosotros diremos con toda legitimidad que los ciudadanos y ciudadanas vascas han elegido a esta lista. Ese es el asunto, y esa es su responsabilidad política». Estas fueron las últimas palabras de Arnaldo Otegi el 17 de febrero de 2005 en un pleno del Parlamento de Gasteiz. Se trataba de una propuesta en defensa de que todas las formaciones pudieran presentarse a las siguientes elecciones autonómicas. Batasuna estaba ilegalizada y Juan José Ibarretxe había decidido disolver la Cámara en lugar de convocar la consulta sobre el nuevo Estatuto que había prometido repetidamente incluso en el Parlamento. Batasuna iba a quedarse fuera de la liza electoral y se aprobó una enmienda del tripartito. Arnaldo Otegi debatió en aquel pleno con Oskar Matute y Rafa Larreina, ahora miembros de EH Bildu.

Desde entonces Arnaldo Otegi ha pasado ocho años en prisión, con un paréntesis en el que estuvo negociando en Suiza las condiciones para final de la lucha armada con los enviados de José Luis Rodriguez Zapatero.

Once años más tarde, Otegi volvió ayer al Parlamento de Gasteiz en su condición de candidato a lehendakari para mantener un encuentro con el grupo parlamentario de EH Bildu. Antes, fue recibido por la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejeria, con la que mantuvo un encuentro cordial de unos quince minutos. Se conocían ya porque habían coincidido en la legislatura 2001-2005.

Arnaldo Otegi iba en realidad a hablar con su grupo parlamentario, al que agradeció públicamente el trabajo de esta legislatura «en favor de la soberanía y las clases populares». Recordó que durante este último periodo preso se ha sentido bien representado por ellos. Añadió luego que mantuvieron un debate sobre la situación política actual, con autocrítica pero también propositivo.

«Una oferta al país»

Arnaldo Otegi compareció ante los medios en la sala de prensa del Parlamento acompañado de Oskar Matute, porque quienes no son parlamentarios hablan formalmente como invitados de un grupo. Y, apenas cuatro días después de las elecciones, fue el propio candidato de EH Bildu quien se adelantó a las preguntas y reconoció que los resultados habían sido malos.

Afirmó que, pese a ello, queda demostrado que el diagnóstico de que la democratización del Estado es imposible había sido acertado. Frente a ello, dijo que en Euskal Herria sí hay correlación de fuerzas para el cambio social. «La tercera vía no es posible, pero en Euskal Herria hay condiciones para hacer una sociedad más justa» y ese camino pasa por el soberanismo. Llamó a la ciudadanía a sumarse a él, convencido de que atraerá a decenas de miles de personas.

Preguntado varias veces por la pérdida de votos y las posibilidades de cambiar de mensaje, dijo primero que las elecciones estaban en clave española y mucha gente votó para cambiar el Gobierno español. Y a renglón seguido Arnaldo Otegi precisó que hacer autocrítica está bien, pero que en EH Bildu «tenemos que dejar de hablar de nosotros mismos y empezar a hablar al país, hacer un diagnóstico de la situación, y presentarle alternativas».

«Es un honor ser el candidato más peligroso para los franquistas»

A Arnaldo Otegi le preguntaron ayer si creía que le permitirían ser candidato, e hizo una valoración jurídica y política desde la convicción de que «los sectores más retrógrados y reaccionarios del Estado español tratarán de impedir que mi candidatura prospere». Afirmó que en términos jurídicos cree que lo tienen muy difícil, aunque no descartó que haya una «ingeniería jurídica ‘made in Otegi’ para poder hacerlo».

Ya en términos políticos, aseguró que para él es «un honor» ser el «candidato más peligroso» para «los herederos del régimen franquista y para las gentes que militan en un partido fundado por siete ministros de Franco». Añadió que ello le hace sentirse «representante los que perdieron la guerra civil, de los sectores oprimidos de Euskal Herria, y de todos aquellos que soñamos con la construcción de una sociedad más justa y más libre».

Arnaldo Otegi se mostró convencido de que EH Bildu obtendrá buenos resultados en las próximas elecciones.