Según ha anunciado el presidente de la empresa, Herbert Diess, el consejo de administración de la compañía y el comité de empresa han firmado un acuerdo para situar a la marca Volkswagen en el camino de la rentabilidad después de las pérdidas por el escándalo de las emisiones falseadas.
Este programa contempla la reducción de 30.000 puestos de trabajo, de los que 23.000 empleos se centrarán en Alemania y los 7.000 restantes en Argentina y Brasil. La compañía prevé contratar a 9.000 personas en nuevas áreas de trabajo. El directivo ha indicado que el objetivo de esta medida es mejorar la competitividad de la compañía y asegurar su futuro.
El presidente del comité de empresa de Volkswagen, Bernd Osterloh, ha indicado que los empleos fijos de la compañía están asegurados. «Hemos acordado que los despidos queden excluidos hasta 2025», y lo ha calificado de «gran éxito» en comparación con lo que sucede en otras empresas.