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Ayerdi dice que en el TAV «cada comunidad tiene su ritmo de trabajo»

El vicepresidente de Desarrollo Económico del Gobierno navarro, Manu Ayerdi, ha afirmado que en relación con las infraestructuras ferroviarias cada territorio tiene «su ritmo de trabajo» y en la CAV «tienen muchos más años» de desarrollo que en Nafarroa.

Las obras del TAV en Nafarroa. (Idoia ZABALETA/ARGAZKI PRESS)
Las obras del TAV en Nafarroa. (Idoia ZABALETA/ARGAZKI PRESS)

Preguntado por el acuerdo entre el Gobierno de la CAV y Fomento para que el TAV llegue a las tres capitales, ha indicado que «ellos están trabajando, nosotros también».

Y ha puesto de relieve que en la CAV estas infraestructuras tienen «muchos más años de historia, de trabajo y de avance», y se encuentran en el Corredor Atlántico, «uno de los top ten de Europa y absolutamente prioritarios», pues la Comisión Europea empuja, sobre todo, los corredores «estratégicos».

Ayerdi ha apuntado además que las negociaciones con el Estado «se producen en un ámbito bilateral», «ellos tienen su momento y están avanzando», mientras que en Nafarroa, ha puntualizado, «tenemos el nuestro y también estamos trabajando», aunque cada uno de los cuatro tramos del corredor por el que aboga el Gobierno navarro «tiene su momento».

Diferente punto de vista ha manifestado el presidente de UPN, Javier Esparza, quien ha reivindicado que «Navarra merece el mismo tratamiento que el resto de los españoles y que el resto de las capitales vascas» y «si algo es bueno» para la CAV también lo es a su juicio para Nafarroa.

«Con nuestros impuestos, con la aportación al Estado, se han realizado redes de alta velocidad por el conjunto de España. Ahora queremos que el Estado haga una apuesta por esta comunidad y asuma la realización de estas obras», ha subrayado.

Por eso, tras aseverar que la alta velocidad «tiene que llegar a Pamplona y a Navarra», Esparza ha pedido al Ejecutivo navarro que «esté a la altura», «que se aclaren de una vez y no limiten el desarrollo de esta comunidad», para lo que ha apostado por evitar «fobias y posiciones políticas históricas que no conducen a nada».