Será el próximo día 25 cuando la asamblea de IU, a la que está previsto que asista el coordinador federal, Alberto Garzón, proclame al nuevo líder, tras las votaciones previstas entre el 17 y el 19, en las que 352 afiliados deben elegir también a la ejecutiva, formada por once personas, y el consejo político, con 35 miembros.

Aunque el plazo para optar al cargo se prolonga hasta el día 9, la sensación en IU es que Marisa de Simón será la única candidata a coordinadora de la coalición.

De no ser así, dice ella en declaraciones a Efe, la decisión se tomará en un proceso «estrictamente democrático», aunque también destaca el apoyo que tiene para su candidatura del coordinador general saliente, José Miguel Nuin, y pone en valor que va «muy bien acompañada, con un equipo fuerte y sólido».

En este sentido precisa que ha trabajado «codo con codo» con Nuin durante los dos mandatos de éste y «su apoyo ha sido fundamental para dar este paso», en el que cuenta, dice, con «un proyecto político y organizativo, y con el convencimiento de que seré capaz de reforzar IU y ensanchar la izquierda en Navarra».

Un proyecto de «continuidad» con el trabajo realizado en los últimos años y con el que IU «ha demostrado que es la izquierda útil y necesaria».

Marisa de Simón seguirá además «la hoja de ruta» marcada en la política de alianzas, donde valora el acuerdo con Batzarre igual que la participación de su coalición en el cambio político.
«Me propongo mantener esta línea porque estamos muy satisfechos con lo realizado, pero quiere ir más allá y que IU esté en todos los frentes y en la calle haciendo visible la alternativa de izquierdas, fundamental para solucionar los problemas de la gente en España y en Navarra», subraya.

Añade sobre este asunto que ha sido «el bipartidismo» el que ha posibilitado «el empobrecimiento y el sufrimiento de millones de personas», lo que hace necesario «despojar a las élites políticas y económicas del poder».

«Esa es nuestra hoja de ruta y esto va a ser un suma y sigue en el interno de nuestra organización, asentada en Navarra, con un espacio propio y reconocido, y un suman y sigue en la construcción una alternativa, en ese proceso de acumulación de fuerzas para construir un movimiento político y social con capacidad suficiente para una ruptura democrática de clase», destaca de Simón.