Maite UBIRIA BEAUMONT
REAU

Una delegación de diputados abre una interlocución con EPPK tras reunirse con Albisu e Iparragirre

Dos miembros del Parlamento francés, el diputado Vincent Bru y el senador Max Brisson, y el eurodiputado José Bové han mantenido esta mañana un encuentro «largo, sereno e intenso» en la cárcel de Réau con dos de los tres interlocutores del Colectivo de Presos Políticos Vascos que cumplen pena en esa prisión parisina. 

Max Brisson, Jose Bové y Vincent Bru, a su salida de la prisión de Réau. (@Maite_Ubiria)
Max Brisson, Jose Bové y Vincent Bru, a su salida de la prisión de Réau. (@Maite_Ubiria)

Los tres electos han trasmitido un mensaje por el que EPPK expresa su voluntad de seguir realizando su aportación al proceso de paz y un saludo a los marchistas que recorrerán desde hoy las prisiones de la capital, para converger el sábado en la gran movilización que recorrerá las calles de París para exigir el final de la legislación de excepción que se aplica a los presos vascos.

Los tres electos han sido recibidos a las 8.30 a las puertas de la prisión por el director de la cárcel y ha sido el responsable de la institución penitenciaria el que les ha despedido, hacia las 11.00, en ese mismo lugar, una vez concluida su visita.

En el atril improvisados a unos metros de allí, con el símbolo de los artesanos de la paz, el primero en tomar la palabra ha sido el diputado centrista Vincent Bru, quien ha dado cuenta del grado de «intensidad y profundidad» del encuentro que han mantenido con Iparragirre y Albisu, una reunión que, ha destacado, «se ha producido en las mejores condiciones, sin ninguna limitación, lo que ha permitido un encuentro sincero y constructivo». Bru, quien ha remarcado que ha visitado tres prisiones en las ultimas fechas y que acudirá próximamente a la prisión de mujeres de Roanne, ha planteado este encuentro como un nuevo paso, que ha enmarcado en la dinámica planteada por la mayoría social y política de Ipar Euskal Herria para poner fin a la política de excepción que se aplica a los presos vascos. Una dinámica que ha permitido abrir, según ha recordado, un espacio de trabajo con el Ministerio de Justicia que, ha deseado que «se traduzca lo antes posibles en avances en la situación de los presos».

Max Brisson, por su parte, se ha mostrado «sorprendido y en cierto modo conmovido» por la «calidad del encuentro» en el que, según ha remarcado, «no ha habido reparo en mirar al pasado», y a las lecturas diferentes sobre «lo ocurrido». Al contrario, Brisson ha destacado que el encuentro ha permitido «abordar una relación de confianza» respecto a los pasos a dar para avanzar en el camino de la paz y la reconciliación.

En alusión al mensaje que les ha sido entregado por los interlocutores de EPPK, que ha sido leído con posterioridad por la presidenta de Bake Bidea, Anaiz Funosas, Brisson ha afirmado que «podría suscribir uno a uno los cinco puntos de ese documento, sin cambiar una coma».

Tras unas palabras por las que Bové ha denunciado «el riesgo grave que tienen estos presos de, una vez cumplida su condena en Francia, recibir un doble castigo en España», Funosas ha leído el texto remitido por los interlocutores de EPPK por el que, además de denunciar la situación que padece el colectivo y reclamar el fin de esa política penitenciaria, se remarca el compromiso de los presos a seguir dando pasos cara a impulsar el proceso de paz.