Ion SALGADO

Patatas listas y adaptadas a los nuevos mercados

Hace tres años, Udapa impulsó la creación de Paturpat, una cooperativa que vende patatas listas para consumir. A día de hoy producen 250.000 kilos al mes en la planta de Jundiz, donde trabajan 24 personas, y confían en seguir ganando terreno en nuevos mercados.

El tiempo es oro y para muchas personas la idea de cocinar durante horas no es una opción viable. Hoy en día los consumidores buscan algo rápido y fácil de preparar, porque «no tenemos tiempo y el que tenemos lo utilizamos en otras cosas». Así lo sostiene Koldo López de Robles, director de Paturpat, una cooperativa alavesa creada en 2015 con este objetivo: comercializar patata lista para consumir.

Según explica, los promotores de la empresa, creada de la mano de Udapa y de las cooperativas de agricultores Propaco y de trabajo asociado Proagral, decidieron crear Paturpat tras comprobar que en los últimos años había descendido un 5% el consumo de patata natural. «Estamos viendo que el consumo de productos frescos, en este caso de patata, desciende paulatinamente en favor de productos alimentarios transformados», apunta. Y consideraban que era necesario tomar medidas para hacer frente a esta realidad. «No nos podíamos quedar viendo el tren pasar», comenta a GARA.

Tenían que adecuarse al mercado actual «y al que viene», porque, a su juicio, «la comida de las amamas no va a existir cuando estas desaparezcan». «Consideramos que en un futuro no muy lejano nuestros hijos no van a pelar muchas patatas», señala antes de detallar las bondades del producto elaborado por Paturpat, que se comercializa con la marca “Depatata”.

Asegura que las patatas se transforman en un proceso «muy suave, respetuoso con la materia prima». Se pelan al vapor, lo que permite desprender la piel sin emplear métodos abrasivos, y se cortan en seis formatos diferentes: corte de tortilla, corte para guiso o patatas bravas, corte de bastón, corte para ensaladas, patatas panadera y patata parisina. Después se escaldan, se envasan al vacío y se pasterizan a baja temperatura y presión controlada, «manteniendo las características de la materia prima». Así se consigue un producto que puede conservarse durante dos meses en refrigeración.

Una tortilla en cinco minutos

López de Robles señala que el formato más demandado es el corte de tortilla, «porque es una bomba; te puedes hacer en cinco minutos una tortilla de patata estupenda». También se vende bien el corte para guisos o bravas, con el que se pueden cocinar unas patatas con chorizo en apenas diez minutos, «el tiempo necesario para que los sabores se mezclen con la patata».

En cuanto a los canales de distribución, detalla que los productos “Depatata” están dirigido a «tres ámbitos diferenciados». «Los comercializamos como ingrediente para industrias alimentarias; los vendemos también en el sector ‘horeca’, de hostelería y restauración, donde están funcionando muy bien; y en la distribución organizada, en los supermercados, lo que se conoce como retail». Reconoce que la venta directa en grandes superficies comerciales está siendo difícil «porque el producto no se conoce».

Los responsables de Paturpat trabajan ya para corregir esta situación y están realizando degustaciones en supermercados de Hego Euskal Herria. «Hacemos una tortilla o preparamos platos de patatas bravas para que puedan probar el producto, y para que vean que es natural», indica el director de la cooperativa, que también patrocina eventos. «En Araba patrocinamos carreras deportivas. Regalamos el producto a los participantes para que lo prueben en sus casas, porque la mejor forma de que el consumidor lo conozca y se convenza es probándolo», añade.

Cabe señalar que, a falta de que los productos despeguen en los supermercados, las cifras de producción revelan que la apuesta de Paturpat ha sido acertada y tiene hueco en el mercado de alimentos transformados. No en vano, actualmente producen al mes 250.000 kilos de patata listas para consumir en la planta de Jundiz, polígono industrial situado en las afueras de Gasteiz, donde trabajan 24 personas.

El lehendakari Iñigo Urkullu asistió el pasado 16 de octubre a la inauguración oficial de las instalaciones, en las que se han invertido 3,5 millones de euros. El inquilino de Ajuria Enea puso en valor el trabajo realizado por Paturpat y la apuesta de Udapa. «Aquí se ha sumado el producto y la investigación para ofrecer una nueva alternativa innovadora. Habéis sabido adaptaros a las nuevas tendencias de consumo demandadas en el mercado. Y lo habéis hecho de la mano de la investigación ligada al sector agroalimentario», manifestó.

Paturpat mira con optimismo al futuro y el director de la cooperativa augura que la demanda de alimentos transformados, como los que comercializa “Depatata”, «aumentará en los próximo años».