Udalberri entiende que «ha llegado la hora de que Bilbao se posicione contra lo que significan estos espectáculos: falta de libertad, entrenamientos crueles y confinamiento constante». Por ese motivo, insiste en una reivindicación recurrente para la coalición, la necesidad de declarar la villa  «ciudad libre de circos con animales», después de que «un problema burocrático hiciera posible que por primera vez en Aste Nagusia se diera cabida a un espectáculo circense libre de maltrato animal».

La concejala Amaia Arenal ha afirmado, sin embargo, que un error burocrático «no es suficiente» y que es necesario «blindar de alguna manera el que no vengan más circos con animales» a la villa. Según ha dicho, «el circo se llenó y mucha gente recibió con satisfacción la noticia», indicando que «los tiempos cambian y la ciudadanía entiende que hay ciertas prácticas que ya no tienen cabida en un momento en el que avanzamos hacía un mundo más respetuoso con el resto de seres sintientes con los que compartimos el planeta».

«Esto es algo que también tiene que entender el equipo de gobierno y hacer de un error burocrático un posicionamiento político para asegurarnos de que en el futuro no habrá en Bilbao más espectáculos circenses en los que se usen animales», ha subrayado.

Arenal ha afirmado que esta decisión ha sido tomada en muchas ciudades gobernadas tanto por PNV como por PSOE, fuerzas políticas que ejercen labores de gobierno en Bilbo, pese a lo cual «cuando en febrero de 2017 UdalBerri presentó esta misma moción tuvo que ser retirada debido a que el equipo de Gobierno presentó una enmienda que vaciaba de contenido la iniciativa». «Creemos que esta vez no nos pueden decir que no. Por un lado ya hemos visto que este verano no ha resultado un problema, más bien todo lo contrario, y por otro Bilbao es ya la única capital vasca que no ha adquirido este compromiso, y una de las últimas del Estado», ha asegurado la edil.